El ejército ruso ha avanzado con letalidad y según estimaciones de Estados Unidos, en las próximas horas podrían rodear la capital de Ucrania con el objetivo de “decapitar al gobierno” para colocar uno afín a su país, informaron fuentes militares occidentales. “No queda mucho tiempo. Creo que mucho dependerá de la resistencia de los ucranianos”, declaró a AFP un alto funcionario del Pentágono, quien dejó ver que ahora el país dependerá básicamente de sus fuerzas terrestres y la resistencia popular.
El apoyo anunciado por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) se ha limitado a diversas sanciones a Rusia, lo que motivó un enérgico llamado de Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania a esta agrupación. “Nos han dejado solos para defender nuestro Estado. ¿Quién está dispuesto a combatir con nosotros? No veo a nadie. ¿Quién está listo para dar a Ucrania la garantía de una adhesión a la OTAN? Todo el mundo tiene miedo”, acusó. “Pregunté a los 27 líderes de Europa si Ucrania estará en la OTAN. Pregunté directamente. Todos tienen miedo, no responden”, fueron sus palabras.
El mandatario también informó que en las primeras 24 horas de movilizaciones rusas, se cuentan al menos 137 muertos y 316 heridos. “Pero no huiré, mi familia y yo nos quedaremos en Kiev”, aclaró, sin especificar su ubicación exacta, ya que es el “objetivo número uno” del ejército ruso, que incursionó al territorio por el lado sur.
Al cierre de esta edición, las tropas rusas mantienen el control de una base aérea estratégica cerca de Kiev y la central de Chernóbil tras sostener enfrentamientos en al menos 17 puntos estratégicos del país. Asimismo, la exrepública soviética asegura haber destruido 70 objetivos militares, entre los que se incluye la agencia de inteligencia del Ministerio de Defensa en Kiev.
Se espera que mañana viernes se realice una nueva reunión de la OTAN, la cual tendrá la participación de Suecia y Finlandia, países que se han mantenido neutrales en conflictos bélicos. Si bien en las primeras horas de este jueves, Sanna Marin, primera ministra finlandesa, dijo considerar la posibilidad de adherirse al organismo. Más tarde, los líderes de ambas naciones reafirmaron su postura de mantenerse fuera por el momento.
Por su parte, los líderes de los 27 países de la Unión Europea (UE) anunciaron más sanciones para los sectores financiero, de energía y de transportes de Rusia, aunque no han anunciado movilización militar dentro del territorio en disputa.
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