Desde hace semanas, en la industria petrolera se habla con insistencia de que el líder del sindicato, Carlos Romero Deschamps, tenía una relación poco clara con el conglomerado brasileño, corruptor de políticos y empresarios, Odebrecht. Los murmullos tenían alas para volar. Dicen los que saben que después de que el Consejo de Administración de Pemex decidió investigar el caso de corrupción de Odebrecht, comenzó a fluir más información. Por eso, agregan, uno de los investigados es Romero Deschamps, al existir información que lo vincula directamente a la recepción de sobornos para dejar fluir los contratos de la compañía sin obstaculizar nada. Quien comenzó su larga carrera petrolera como chofer del histórico líder del sindicato, Joaquín Hernández Galicia, “La Quina”, sí está preocupado, porque ya le han hecho saber desde los órganos de poder político, que si la PGR le encuentran algún dinero extra procedente de Odebrecht no lo van a proteger, porque su liderazgo se ha mermado y no representa votos que podrían servir en las próximas elecciones. Por el contrario, le alegan, sería una carga, oséase, un cartucho quemado.
12 de Enero de 2025
