El presidente electo Andrés Manuel López Obrador anunció que Rogelio Jiménez Pons será el director de Fondo Nacional del Fomento para el Turismo (Fonatur) y Gabriela Cámara Bargellini titular del Consejo de Promoción Turística de México(CPTM). En la conferencia de prensa en que anunció la ampliación del Tren Maya, López Obrador señaló que la decisión de esos dos nombramientos fue tomada en acuerdo con los que serán sus secretarios de Hacienda, Carlos Urzúa, y de Turismo, Miguel Torruco Marqués.
Vamos a tener este equipo para llevar a cabo proyectos turísticos, fomentar esta actividad económica que es muy importante”, sostuvo López Obrador desde las escalinatas de su casa de transición en la colonia Roma.
Rogelio Jiménez Pons
Rogelio Jiménez Pons, arquitecto de profesión, cuenta con experiencia en el sector turístico tras haber presidido la Dirección de Turismo en la administración del priista Leandro Rovirosa Wade, de 1977 a 1982, en Tabasco. En aquel momento, su labor se destacó por coordinar uno de los proyectos urbanísticos más importantes de Villahermosa, su capital, conocido como Tabasco 2000, el cual le valió a la entidad un reconocimiento internacional que se le otorgó en Francia. Con su firma JP Arquitectos, junto con Carlos Lope, lideró además el proyecto de la Torre Empresarial Tabasco, que en inicio se planeó como hotel. Entre las obras que tendrá a su cargo como director del Fonatur está precisamente la construcción del Tren Maya, el cual iniciará en Palenque, Chiapas; pasará por Tenosique y Balancán; desembocará en Xpujil y Kalakmul, Campeche; bajará a Bacalar, Tulum y Cancún, Quintana Roo y además incluirá a Mérida y Valladolid en Yucatán y a Campeche capital, y como se informó esté lunes se ampliará el proyecto original para pasar de una ruta de 900 kilómetros a un total de mil 500 km.
Gabriela Cámara Bargellini
La empresaria Gabriela Cámara Bargellini, propietaria de los restaurantes Contramar, cuenta con una trayectoria de dos décadas en la industria gastronómica. Contramar y Merotoro sus estandartes. En 2015 abrió su último proyecto gastronómico y el primero fuera de México, Cala que a los pocos meses de su apertura enamoró a San Francisco, California. En donde además implementó un sistema de empleo a exconvictos hasta en 70% de su personal. Con ello buscó contratar a gente sin experiencia pero que quisiera aprender y superarse, para entrenarla en el servicio que a ella le gusta ofrecer de ser atento, anticipado, pero nunca empalagoso. Un método que también utilizó en sus restaurantes en México. Fue también socia en Puntarena, Barracuda y Capicúa, en la Ciudad de México. Sus cercanos la describen como una mujer apasionada de la sustentabilidad, ya que el distintivo de sus marcas es comprar productos frescos y de alta calidad directamente a quienes los capturan o cosechan. Lo que le ha permitido tener una relación cercana con cooperativas pesqueras y agrícolas. Aunque no estudio gastronomía en inicio sino historia del arte, eso no le impidió destacar en el sector restaurantero. Aprendió sobre la marcha como reconoció en una entrevista con El Financiero dos años atrás. Ha destacado que ella misma se impresiona que la cocina mexicana pueda ser tan sofisticada y tan simple al mismo tiempo. “La comida mexicana tiene cada vez más valor internacional, es de las gastronomías más complejas y ricas del mundo”, señaló en 2016, cuando promovía la apertura de su cocina en el extranjero. Será la primera vez que una empresaria del sector gastronómico dirija el Consejo. Relevará en el cargo al actual director general de Promoción Turística federal, Héctor Flores Santana, quien dirige el Consejo desde junio de 2017.