Roemer, acorralado
La estrategia de Roemer de difamar y con un mensaje en video tratar de intimidar a quienes lo acusan no funcionarán, pues, dicen los bien enterados, que los casos contra el señor son muy sólidos
En el gobierno de la Ciudad de México poca importancia le dieron a la reciente aparición de Andrés Roemer en un video, intentando defenderse de las acusaciones de abuso sexual y violación en su contra.
La estrategia de difamar y con su mensaje tratar de intimidar a quienes lo acusan no funcionarán, pues aseguran los bien enterados que los casos contra el señor Roemer son muy sólidos, ha perdido varios amparos y no son cuatro, como dijo, sino muchos más los casos que ya pesan en su contra, y él lo sabe, porque las peticiones de extradición en Israel, a donde huyó, se están incrementando.
Sólo un dato, la ley prohíbe a sus abogados acceder a las carpetas, por tratarse de delitos graves.