Restringen pesca para proteger hábitat de la vaquita marina

Las secretarías de Marina, Medio Ambiente y Agricultura anunciaron este sábado nuevos parámetros para determinar el cierre de zonas de pesca en el Alto Golfo de California para proteger a la vaquita marina, una especie endémica que se halla en peligro de extinción.

“Con el fin de consolidar el compromiso de proteger a la vaquita marina (phocoena sinus), cuya pesca incidental es el resultado de la captura ilegal de la totoaba (totoaba macdonaldi), dio inicio el establecimiento de esquemas para determinar el cierre total o parcial a la pesca por actividades ilegales que ayudarán a la vigilancia y supervisión en el hábitat de la vaquita marina”, informaron las autoridades en un comunicado.

La normativa, vigente tras su publicación en el Diario Oficial de la Federación, establece “indicadores, factores detonantes y acciones predeterminadas” para regular “artes, sistemas, métodos, técnicas y horarios” para la pesca en dicha región, hábitat natural de la especie.

Las nuevas medidas ubican tres polígonos que establecen las modalidades de protección para la vaquita marina: área de prohibición de todas las redes de enmalle incluyendo las llamadas “agalleras”; área de refugio para la protección y zona de tolerancia cero, con el fin de que autoridades y población sepan dónde está prohibida la pesca.

El reglamento, elaborado por la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca —dependiente de la secretaría de Agricultura—, aplica para embarcaciones menores y mayores, e incluye sitios de desembarque, así como el uso de sistemas de monitoreo de los navíos.

Las medidas de control “comprenden el cierre parcial o total a las pesquerías hasta por un mes en la Zona de Refugio de la Vaquita” y buscan proteger a otras especies en riesgo como la totoaba, así como su entorno natural, detalló el comunicado publicado hoy por las tres dependencias.

México ha sido sancionado en años anteriores por autoridades pesqueras de Estados Unidos, que restringieron la importación de productos marinos del Alto Golfo de California (noroeste), con el fin de exigir mayores medidas de protección para la vaquita marina.

El principal reclamo es detener el uso de redes de enmalle utilizadas para pescar a otras especies, pero que pueden enredar, ahogar y matar a esta marsopa, de unos 150 cm de largo y menos de 50 kilos.

La vaquita marina es sobre todo una víctima colateral de la caza ilegal de totoaba, otra especie en peligro de extinción, cuya demanda ha escalado, pues su buche es un codiciado manjar en China, donde se pagan miles de dólares por pieza.

Según el Center for Biological Diversity de Estados Unidos, la población de la vaquita marina decayó de unos 560 ejemplares en la década de 1990 a tan solo 10 en la actualidad.

BG

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