Al concluir la conferencia mañanera de este jueves, un reportero corrió tras el presidente Andrés Manuel López Obrador e ingresó a una de las áreas restringidas para la prensa, sin que la Ayudantía interviniera.
Con la entrada de López Obrador a la presidencia, el Estado Mayor Presidencial, responsables de la seguridad de los mandatarios, fue eliminado y en su lugar, el Gobierno de la República integró a su equipo a 20 jóvenes de diferentes profesiones para proteger al Presidente, sin embargo, hoy ninguno evitó que el reportero corriera detrás del tabasqueño.
Esta mañana, cuando el Presidente dejó el templete en el que realiza su conferencia cada día, el comunicador saltó de su silla y de cuatro pasos llegó hacia él. Un integrante del equipo de comunicación social alcanzó a jalarlo del brazo, pero se soltó.
Al llegar a la puerta por la que sale López Obrador del Salón Tesorería, el reportero de la revista Proceso fue nuevamente detenido, pero -por orden de Jesús Cantú Escalante, director general de estrategia- se le permitió el acceso.
Aunque otros integrantes del equipo de Comunicación Social de Presidencia ni siquiera notaron el evento, fue más notoria la ausencia de los elementos de la Ayudantía, que cada mañana están, al menos dos, en el salón, pero esta mañana ninguno estuvo presente.
El caso no escaló, pero mostró la capacidad de reacción del equipo que fue elegido por el mandatario para su seguridad.