“Ejército asesino”, “No pasarán” y “Existimos porque resistimos” fueron tres de las consignas que se hicieron presentes en el Conversatorio contra la militarización y las guerras que se realizó en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM este día, el cual concluyó con una “velada por la vida” que reunió decenas de veladoras encendidas frente a la torre de Rectoría.
Con la participación de activistas y familiares de víctimas de desaparición y asesinato, así como de personajes como María de Jesús Patricio Marichuy, vocera del Consejo Nacional Indígena, y Mario González, de la comunidad Coca de Mezcala, Jalisco, se desarrolló este evento en el que se abordó la militarización del país.
Quienes intervinieron en el encuentro coincidieron en lo innecesario que resulta recurrir a los elementos de las Fuerzas Armadas para reforzar las labores de seguridad pública. Refirieron que la presencia de militares en las calles tiene una relación directa con el alza en las violaciones a los derechos humanos y advirtieron que en el país no se juzga a estos uniformados, por lo que la sociedad se ve en la necesidad de recurrir a instancias internacionales para buscar justicia.
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El Conversatorio inició con la asistencia de 70 personas, pero la cifra ascendió a cerca del centenar cuando tras el encuentro los participantes se movilizaron hacia la torre de Rectoría para llevar a cabo la velada.
“No pasarán”, se leía en una de las mantas que los integrantes de la velada, quienes caminaban con veladora en mano, portaban para manifestar su rechazo a la violencia como modo de gobernar y reprimir.
Dichas veladoras fueron acomodadas sobre el mensaje “No a la militarización”, el cual fue escrito en el suelo, lo que permitió apreciar el mensaje con luces que resaltaban con la oscuridad de la noche en Ciudad Universitaria.
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