Enero es el mes ideal para los deseos y retos que permitan recuperar una buena imagen. Hacerlo sin supervisión o un análisis previo del estado de salud para conocer cómo se encuentra nuestro cuerpo a partir de los 40 años, y someternos a cambios sin saberlo, no es la mejor idea.
Al entrar a la década de los 40, e incluso poco antes, las modificaciones hormonales generan cambios importantes en las mujeres siendo este un reto mayor para lograr los objetivos estéticos deseados.
Primeros pasos
Acude con personal médico especializado para solicitar una revisión general de tu estado de salud, y solicita una orden para realizarte estudios sanguíneos de laboratorio, de orina, perfil hormonal, y densitometría ósea para conocer el funcionamiento de los órganos en general y el aprovechamiento o absorción que tienen de los alimentos y vitaminas.
Ayuno intermitente
Una de las grandes herramientas que han sido útiles para un détox eficiente y recuperar el equilibrio, es el ayuno.
Lo ideal es iniciar entre tu último alimento de un día y el primero del otro, con un ayuno de 12 horas para poco a poco irlo incrementando. La reducción en ingesta de calorías estimula los procesos metabólicos, reduce los niveles de azúcar, así como de colesterol.
Para optimizarlo es ideal consumir más alimentos vegetales naturales y de preferencia, cocidos, así como beber por lo menos dos litros de agua al día.
Vegetales y frutas
Consumir por lo menos dos tazas de vegetales cocidos en cada ingesta, ayuda a optimizar el trabajo del cuerpo para un metabolismo óptimo. Fortalece las células, reduce la inflamación. El consumo de fibra permite desechar de forma fácil lo que el cuerpo no requiere, además de generar saciedad, por lo que es un gran aliado para perder peso.
La fruta es ideal consumirla como postre después de los alimentos. Sus nutrientes se absorben de mejor manera, pues no se les da tiempo para convertirse en insulina.
Alimentación sana. La dieta détox es una forma de limpiar con las toxinas del organismo, a través de una alimentación sana y equilibrada.
Proteína
La base de una alimentación redonda es la que contiene vegetales, frutas y proteína. Por ello, es de gran relevancia consumirla además de por las mañanas, también por las tardes.
En caso de que sea animal o vegetal, la proteína permite al cuerpo renovar las células y recuperar o fortalecer el músculo. Además, evita rupturas de huesos y también beneficia a las hormonas y procesos químicos.
Ejercicio
Ya sea de alto o incluso de bajo impacto, llevar a cabo por lo menos 25 minutos diarios de ejercicio es fundamental para lograr un cuerpo saludable, se tenga la edad que se tenga.
Si eres una persona que se ejercita de forma regular, lo ideal es continuar así, además de sumar ejercicios para generar músculo y elasticidad.
En el caso de que no te ejercites o lo hayas dejado de hacer, recupera la forma. Inicia con caminatas breves, clases de yoga o aeróbicos y pilates. Todo lo que te haga sumar resistencia, además de generar músculo.
30 minutos de actividad física diaria serán efectivos, además de ser la clave para comenzar con un buen entrenamiento.
El dato. El cardio, los ejercicios de fuerza y la flexibilidad son las actividades en las que más deberás trabajar.
›Si bien todas estas recomendaciones parecen muy generales, llevarlas a cabo es básico para lograr mejorar nuestra condición de salud a los 40, y por consecuencia alargarlo hasta por muchas décadas más. El inicio de año es un gran momento para hacerlo, no importa si es a inicio o final de enero pero es una tarea que debes iniciar ya.
@iremunoz
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