Con bastante rapidez, aunque nunca lo habría imaginado, Lin Mei Ai se volvió un fenómeno de la internet: sus posts sobre temas tan particulares de la Rusia medieval eran tan interesantes y verosímiles, que pronto, le comenzaron a invitar a programas de radio, televisión, pódcast y a citarle en cualquier artículo de periódico, blog, escrito, paper académico y hasta en la occidental Wikipedia.
Sobra decir, que Lin Mei Ai siempre negó presentarse en vivo o en cualquier forma o medio que enseñase su rostro o su voz, pero también sobra decir que poco a poco, comenzó a disfrutar de la atención brindada. Ser considerada una gran experta mundial, le llenaba de gusto.
Sus dos más citadas y recurrentes historias, tenían que ver con el un francotirador que utilizaba una resortera construida con fresno, una bolsa de proyectil de cuero de toro y tendones de ciervo para disparar.
La segunda tenía que ver con el Dr. Zarevich, un hombre brillante en inteligencia, dijo que había resuelto la teoría de la relatividad mucho antes que Einstein, pero que desapareció de San Petersburgo cuando intentó desenmascarar a Rasputín.
Las crónicas históricas sobre Zarevich apenas susurran sobre su destino, dejando tras de sí un vacío de incertidumbre, pero Lin Mei Ai, con su pluma maestra, desentrañó los velos del tiempo para revelar una verdad oculta que –a su parecer– había permanecido enterrada durante siglos: un tipejo de origen griego y de nombre Ioanis, asesinó a Zarevich a cambio de quedarse con su mujer y de una pequeña cantidad suficiente para una borrachera de una semana.
Total, que, en una dictadura como la China, no fue poca cosa que Lin Mei Ai se convirtiese en una popularísima estrella y en una especie de experta reconocida en el tema ruso medieval. No es por nada, pero la gente quedó cautivada por sus posts y se convirtió pronto en un fenómeno cultural, en un icono.
Entonces surgió un pequeño grupo de seguidores apasionados quienes comenzaron a analizar los textos a profundidad y creyeron descubrir pistas ocultas y mensajes cifrados en los textos de Lin Mei Ai. Las pistas, se decían en chats de la deep web, lejos de mirones y policías, en clave apuntaban a eventos y personas en el mundo real. A medida que el análisis de sus textos avanzaba, surgieron más teorías de que el personaje era parte de un experimento secreto de inteligencia artificial o que estaba basado en una figura real cuya existencia había sido encubierta.
Las claves, probaron ser ciertas para algunos. Entonces, con las pistas ocultas se cuestionó la gente: ¿hasta dónde era real el enigma intrigante? ¿Estaba hablando lo mismo de secretos nucleares que de ovnis? Se abrieron foros en línea, la gente quería colaborar en la resolución de los posibles acertijos escondidos.
Alguien descubrió después que las pistas ocultas no sólo estaban en el texto escrito, sino también en las ilustraciones, los números de página y las fechas mencionadas.
Y como ya se dijo, ella desapareció y no se ha vuelto a saber de su paradero. Pero algunos activistas en línea recién encontraron algunas intrigantes pistas de símbolos ocultos que piensan, podrían descifrar sus coordenadas geográficas. ¿Será cierto? Se ha organizado un grupo de buscadores para intentar encontrarle. ¿Usted donde piensa que está?