La Asamblea Nacional de Francia votó por prolongar el estado de emergencia a tres meses, una proposición que después deberá ser refrendada por el Senado. Por su parte, el primer ministro de Francia, Manuel Valls, advirtió hoy que puede haber riesgo de armas químicas y bacteriológicas en futuros atentados terroristas.
“Estamos en guerra. No en una guerra a la que la historia nos ha acostumbrado trágicamente. Una nueva guerra, exterior e interior, en la que el terror es el primer objetivo y el primer arma”, agregó el primer ministro ante la Asamblea, que enumeró los atentados que ha sufrido Francia en el último año.
El jefe del Gobierno francés pidió este jueves un control sistemático en las fronteras de la Unión Europea para los “beneficiarios de la libre circulación” y advirtió de que, de no hacerse, la supervivencia del Acuerdo de Schengen ( tratado por el que varios países de la Unión Europea han suprimido los controles en las fronteras interiores) está en juego.
La decisión fue tomada casi por unanimidad tras el análisis del proyecto de ley que presentó temprano este jueves el primer ministro Manuel Valls.
El estado de emergencia permanecerá en vigor hasta finales del próximo mes de febrero en Francia continental y en los denominados territorios de ultramar.
El estado de emergencia faculta a la policía francesa a realizar registros sin necesidad de autorización, salvo en domicilios de jueces, abogados y periodistas.
Fue decretado inicialmente por el presidente Francois Hollande la noche de los atentados de París, el pasado viernes 13 de noviembre. Desde entonces la policía francesa ha realizado tres redadas nocturnas en más de cuatrocientas viviendas.
Autorizan a policías a llevar su arma fuera de servicio
El Ministerio francés del Interior va a autorizar a los policías a que lleven sus armas reglamentarias cuando no estén de servicio, incluso sin la obligación de vestir al tiempo chaleco antibalas, informó hoy el director general de la policía, Jean-Marc Falcone. Esa respuesta supone un cambio de actitud con respecto a la circular que envió a las comisarías el pasado sábado, un día después de los atentados que provocaron en París y Saint-Denis 129 muertos, cuando recordó que los agentes no pueden llevar armas cuando no llevan un chaleco antibalas.
Falcone agregó hoy que los policías “podrán usar el arma en todo momento a condición de que respeten el derecho penal y las reglas de la legítima defensa”.
Los agentes deberán llevar también un brazalete que permita identificarles para evitar confusión en caso de que la usen y, además, tendrán que haber efectuado previamente al menos una sesión de tiro.
Hasta ahora los agentes debían dejar sus armas en la comisaría o en sus domicilios cuando no estaban de servicio.
Tras los atentados del pasado viernes los sindicatos policiales reiteraron su reclamación de permitir a los agentes que lo soliciten ir armados en sus horas libres.
Para justificar su reclamación, los sindicatos se apoyaron en el caso de un comisario destinado en las afueras de París que estaba en el Bataclan el pasado viernes, además del de un agente que fue abatido por los terroristas ese mismo día en la terraza de un café de la capital.
Con información de EFE y DW