La NASA está a punto de emprender una nueva misión en la cual tratarán de desviar el rumbo de un asteroide en una prueba que servirá para, en casos futuros, proteger a la Tierra.
Este proyecto se hará este martes a las 22:20 horas, y consiste en lanzar una nave espacial desde la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California, que se dirigirá hacia el asteroide que está a más de 9 millones de kilómetros de distancia, con el objetivo de estrellarse con él y que los científicos observen si logran cambiar ligeramente su trayectoria. Esto no representa ningún peligro para nuestro planeta, ya que gracias a la distancia en la que se encuentra, no afectaría la Tierra ni los cuerpos celestes a su alrededor.
El personal de la NASA ha logrado identificar casi todos los asteroides cercanos a la tierra que podrían causar daños, y la buena noticia es que ninguno se dirige hacia nuestro planeta.
“Cuando le digo a la gente que la NASA está realmente haciendo esta misión, no lo creen al principio”, expresó Nancy Chabot, científica planetaria de Johns Hopkins, Laboratorio Universitario de Física Aplicada.
Objetivo. El asteroide se encuentra a más de 9 millones de kilómetros.
La astrónoma también comentó que pese a que en algunas películas suelen mostrar que para combatir un asteroide es necesario volarlo en pedazos, esta no resulta ser la opción de los expertos en la vida real, ya que la explosión generaría miles de fragmentos en todas direcciones, lo que resulta igual o más peligroso.
Por este motivo, expertos prefieren identificar las rocas espaciales mucho antes de cualquier posible colisión y utilizar métodos más controlados para alterar su trayectoria.