El primer ministro de Haití, Ariel Henry, hizo un llamado en la Asamblea General de la ONU para detener a los culpables de la muerte de Jovenel Moïse, presidente de Haití, asesinado en julio pasado.
Durante su intervención, Ariel Henry reafirmó el agradecimiento del gobierno haitiano por la iniciativa de las Naciones Unidas; de organizar una ceremonia de homenaje el 14 de julio último en memoria del presidente asesinado.
“Murió trágicamente bajo las balas asesinas en la noche del 6 al 7 de julio. Los mensajes de consuelo y las expresiones de simpatía de los Gobiernos de los Estados miembros de la organización han sido apreciados por el pueblo haitiano”, dijo el primer ministro.
La migración es el otro reto al que se enfrenta Haití
De iigual manera, Henry aseguró que las migraciones de haitianos continuarán mientras haya áreas de prosperidad en nuestro planeta al tiempo que la mayor parte de la población mundial vive en una precariedad a veces extrema, sin perspectivas de una vida mejor, informó en un video pregrabado que fue proyectado en la Asamblea General de la ONU, en Nueva York.
La pobreza en Haití es uno de los factores por los que la gente deja el país, mencionó el primer ministro en su intervención.
Sin querer cuestionar el derecho de un estado soberano a controlar el acceso de extranjeros a su territorio o a enviar de regreso a su país de origen a los que ingresan ilegalmente en él, creemos que muchos países ahora prósperos han sido construidos por sucesivas oleadas de migrantes y refugiados.
Ariel Henry.
La afluencia de haitianos en México, queriendo pasar a Estados Unidos, ha alcanzado durante estos días un punto álgido.
El trato hacia los migrantes e incluso su deportación masiva han llenado de críticas al gobierno de Joe Biden.
Por lo que el primer ministro hizo la invitación a la comunidad internacional a fortalecer urgentemente las medidas para mejorar las condiciones de vida en los países que aportan refugiados políticos o económicos.
BG
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