Premian a IPN por crear bioplástico hecho de cáscara de naranja

30 de Noviembre de 2024

Premian a IPN por crear bioplástico hecho de cáscara de naranja

Premian a IPN por crear bioplástico hecho de cáscara de naranja
Foto: Twitter/ IPN (@IPN_MX)

Este bioplástico puede emplearse en la elaboración de botellas que se biodegraden en un tiempo menor a un año

Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) de la UPIBI (Unidad Profesional Interdisciplinaria de Biotecnología) de la carrera de Ingeniería Ambiental lograron el tercer lugar en la categoría Economía Circular del Reto CDMX del Concurso de Innovación.

El concurso se trataba de un proyecto para generar un bioplástico hecho de la cáscara de naranja, que pueda emplearse en la elaboración de botellas biodegradables en un tiempo menor a un año.

Con el apoyo del Gobierno de la Ciudad de México, Ultrahack junto con la Embajada de Finlandia, Business Finland y partners industriales reconocieron al proyecto “Narandam, orange is the new Green” de los alumnos de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Biotecnología (UPIBI).

Los alumnos cuyo nombre son Adrián Emanuel Tun Panti, Karen Itzel Osorio López, Antonio Falcón Martínez e Itzel Berenice Rosas Bermúdez, fueron asesorados por el Maestro en Ciencias, Saúl Hernández Islas.

Los jóvenes explicaron que planean producir botellas plásticas biodegradables y biobasadas, es decir que están hechas de materia vegetal desechada. Se busca una recolección de residuos con cáscara de naranja que se obtiene de diversas fuentes como negocios, comercios y empresas dedicadas a la producción de jugos.

Los alumnos expresaron:

De esta forma nuestros proveedores se verán beneficiados al disponer sus residuos de manera óptima, para así nosotros elaborar botellas que se degradan en un lapso de 3 a 6 meses

Con respecto a las pruebas que se realizaron indicaron que las preliminares obtuvieron un resultado positivo, pues el material de la muestra indagada tiene características físicas similares a las de los plásticos convencionales ya que sus componentes poseen propiedades que aportan rigidez y flexibilidad, así como también capacidad de polimerización e incluso actividad antimicrobiana.

No obstante, para una correcta estandarización de la fórmula requerida para el proceso, los estudiantes del IPN necesitan de diversas pruebas, entre las que destacan las destructivas, de biodegradabilidad y las relacionadas con la obtención y purificación del polímero, por lo que buscan un financiamiento inicial para llevar a cabo el desarrollo de un prototipo apegado a las necesidades del cliente.

Los galardonados dijeron que el producto está dirigido a empresas que se preocupan por su imagen, el bienestar de sus consumidores y que comercializan servicios de la industria alimentaria, y expresarón:

“Con Narandam nuestros clientes facilitan su incorporación y certificación como empresas socialmente responsables e industria limpia”

Los estudiantes contemplan el cierre del ciclo de los envases mediante un plan de manejo de residuos, con la responsabilidad compartida con los clientes. El proceso se hará en dos etapas, en la primera se plantea una campaña de concientización y recolección de botellas, la segunda fase se mandarán a una planta de compostaje asociada a ellos para asegurar su correcta degradación.

De acuerdo con el estudio de viabilidad económica, los estudiantes estimaron un precio unitario que se encuentra dentro del rango de precios de botellas hechas a partir de biopolímeros a nivel internacional y dicen que el proyecto es económicamente rentable al presentar un tiempo estimado de recuperación de la inversión de 3 años con 3 meses.

Finalmente, los politécnicos expresaron que con Narandam los clientes acceden a beneficios únicos en el mercado mexicano como la disminución de gases de efecto invernadero hasta en un 30 por ciento en comparación con el reciclaje de plásticos, además de que se les brinda la oportunidad de aperturar sistemas de comercio emergentes como el mercado de misiones. OM