La presencia de influenza aviar en el país continúa afectando a algunos estados. En Yucatán, al menos 16 granjas avícolas han entrado en etapa de “vacío sanitario” tras la presencia del virus AH5N1, mismo que ha provocado la muerte de miles de aves y el aumento de precio del huevo.
El pasado 18 de noviembre se detectaron los primeros casos de influenza aviar en dos granjas, dando pie a una situación que ha crecido durante las siguientes semanas. Ahora, al menos 16 unidades avícolas de un total de 162 están en la etapa más importante del sistema de bioseguridad.
De acuerdo a Jorge Manuel Puerto, presidente de la Asociación de Avicultores del Sureste, el “vacío sanitario” es imprescindible para limpiar las granjas que mostraron presencia del virus. “Desinfectarlas, eliminar todas las aves y destruir incluso el alimento”, explicó a EFE.
Una vez transcurrido el tiempo necesario, las autoridades autorizarán el ingreso de aves centinelas como gallinas y pavos no vacunados a las unidades avícolas, para posteriormente monitorear la situación durante un periodo de 21 días, tiempo en que el virus se manifiesta.
En 2019, Yucatán ocupó el sexto lugar nacional en producción de huevo de gran calidad, con la generación de 87 mil 65 toneladas de este alimento. La cifra no ha variado con el paso del tiempo, permaneciendo entre la quinta y sexta posición actualmente.
Respecto a la producción de pollo Yucatán ocupa el quinto lugar, mientras que el primero con lo que respecta a la de pavo, posicionándose como uno de los principales productores del país.
Aves recibieron vacuna
Puerto detalló a EFE que el gobierno autorizó una medida extraordinaria para evitar el desabasto en Yucatán: vacunar a las aves. Esta medida se dio a través del Servicio de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
Así, aquellas que no estaban contaminadas con la gripe recibieron la vacuna. Las unidades avícolas comenzaron primero por las aves reproductoras —llamadas ‘pesadas’, porque son las que ponen huevos—, y posteriormente se brindó protección a las aves que se crían para la producción de carne —'ligeras'—.
Pese a esta medida, Yucatán presentó perdidas “millonarias” ante la muerte de las aves, ya fuera por el virus o por la cuarentena que se efectuó en el mismo mes en que se identificó el virus. La sacarificación de los animales, tanto enfermos como sanos, fue obligatoria.
Aunque Puerto Cabrera indicó que el desabasto de huevo en la entidad apenas fue de cinco a ocho por ciento, medios locales refieren que algunas zonas del estado se han visto afectadas con la gripe aviar, que ha causado el incremento del precio a 65 y 70 pesos por kilo. RM
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