Dado que los países de bajos ingresos serían los más afectados por la desaceleración económica y sus implicaciones, “la pobreza y el hambre podrían crecer aún más”, advirtió Kristalina Georgieva, directora del Fondo Monetario Internacional (FMI).
En la víspera de las Reuniones de Primavera del FMI y el Banco Mundial, la ejecutiva señaló que este año se continuará desacelerando el crecimiento económico global peligrosamente y afectará a los más pobres, a pesar de la reapertura de China que se considera fundamental para la expansión.
Según las estimaciones de los institutos internacionales, el crecimiento económico estará por debajo de 3 % este año, un nivel inferior a la media de 3.8 % de las últimas dos décadas.
El FMI reconoce que tras la fuerte recuperación en 2021 después de la crisis sanitaria, una estrepitosa caída en 2022, que fue aderezada por la guerra entre Ucrania y Rusia, el principal elemento que provocó que el crecimiento mundial se redujera a casi la mitad de una tasa de 6.1, a una de 3.4 %, continuarán sus efectos.
La inflación, las secuelas de la Covid-19, y la deuda que se generó modificaron la economía mundial, es decir, fueron el punto de inflexión.
A pesar de que algunas naciones están presentando una disminución en la formación de precios, el organismo lo cataloga como un riesgo considerable la espiral inflacionaria.
PUEDES LEER: Covid-19 llevó a 16 millones de menores a situación de pobreza en AL
Georgieva indicó que el camino hacia adelante para reanudar un crecimiento sólido, es “confuso y lleno de baches”.
Un debilitamiento del comercio global debido a la desaceleración económica repercutirá en mayor medida en las exportaciones de países pobres, mientras que los costos de su endeudamiento irán en aumento.
Además, la desfragmentación comercial que implicó rupturas en las cadenas productivas, así como los crecientes riesgos en las tensiones geopolíticas son los retos a los que se enfrentarán los países.
Lo más preocupante es que el crecimiento que prevé el FMI y el Banco Mundial para este año que estaría por debajo de 3 %, podría extenderse hasta por los próximos cinco años, el más bajo desde 1990, refirió la ejecutiva.
Un crecimiento de esta índole podría traer otras consecuencias colaterales a las economías que quedaron mal paradas tras la crisis sanitaria de 2020.
El próximo 10 de abril comenzarán las Reuniones de Primavera del FMI y del Banco Mundial, que concluirán el 16 de este mes.
SIGUE LEYENDO |
4T destina $352 mil millones a programas sin impacto en pobreza
