Pobres acuerdos penitenciarios
El acuerdo que presumió López Obrador sobre los contratos con los penales federales es parcialmente cierto, pues mientras las empresas bajaron el costo, también el gobierno. Ahora recibirán menos uniformes, insumos y menos comida los presos
Aquellos acuerdos que han presumido en la mañanera, respecto a que ya no hay contratos leoninos entre el gobierno y los penales federales, es parcialmente cierto.
Si bien las empresas bajaron el costo, también el gobierno, y ahora recibirá menos uniformes para los presos, menos insumos para el personal administrativo y también menos gramaje en la comida de los internos, quienes por cierto comenzaron a quejarse por comer menos.
Este es un esquema financiero que heredó el gobierno del actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, y que resolvió con la típica frase de “cada quién su golpe”.
Por cierto, el Grupo Carso ya vendió su parte, y ya no es una de las empresas contratadas para estos centros, porque dicen que ya no iba a ser negocio.