Este miércoles, Estados Unidos declaró formalmente que las fuerzas armadas rusas han cometido crímenes de guerra. “Puedo anunciar que, con base en la información actualmente disponible, el gobierno de Estados Unidos evalúa que miembros de las fuerzas rusas han cometido crímenes de guerra en Ucrania” informó Antony Blinken, secretario de Estado del país.
La resolución llega después de múltiples acusaciones de ataques a objetivos civiles y de asistencia como edificios residenciales, hospitales de maternidad, centros de salud y los corredores humanitarios destinados a la evacuación de civiles. Entre los bombardeos a civiles destacó el ataque a hospital de pediatria y maternidad y un teatro en Mariúpol, este ultimo con la palabra “niños” escrito en su parte exterior que indicaba la presencia de menores.
›Y aunque el gobierno estadounidense continuará investigando otras acciones de la milicia rusa que puedan catalogarse de esta forma, Blinken anunció que “una corte de justicia con jurisdicción sobre el delito es la responsable en última instancia de determinar la culpabilidad penal en casos específicos”.
Tras la declaración que podría poner al presidente ruso Vladímir Putin ante una corte internacional, Ivica Dacic, presidente del Parlamento de Serbia, expresó su apoyo a la exnación soviética, asegurando que “Serbia no desea la guerra, pero no hay dilema alguno en sobre de qué lado están sus simpatías”, en referencia al apoyo que ha recibido de esta nación: “Es mentira que ganaríamos algo si nos pusiéramos contra Rusia. Rusia sobrevivirá sin nosotros, pero nosotros perderíamos su apoyo. Y si los perdemos a ellos, no tendríamos ya a nadie”, justificó.
A pocas horas de que se cumplan las primeras cuatro semanas de la ofensiva en Ucrania, el ejército ruso no sólo no ha avanzado, sino que ha perdido a muchos de sus elementos. Según estimaciones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), al menos siete mil soldados de esta nacionalidad han muerto en combate, aunque la cifra podría llegar a los 15 mil, una cifra calculada a partir de información de funcionarios ucranianos, datos publicados por la exrepública soviética y reportes de inteligencia recopilados de fuentes abiertas.
Cabe destacar que Rusia perdió 15 mil soldados en todo el tiempo que duró su intervención en el territorio de Afganistán, de 1979 a 1989.
En la jornada bélica de esta cuarta semana, las fuerzas ucranianas lograron recuperar Makarov, una ciudad al oeste de la capital, aunque imágenes satelitales de la empresa de tecnología espacial Maxar muestran que los ataques e incendios no se han detenido en Mariúpol.
Se espera que el presidente estadounidense Joe Biden —que acaba de llegar a Bruselas este miércoles— participe en varias reuniones con líderes mundiales, donde se analizará la imposición de más sanciones a Rusia y la posición de los países ante el conflicto. En la capital belga, el mandatario hablará inicialmente en una cumbre de la OTAN, seguidamente una del G7 y finalmente una de los líderes de la Unión Europea.
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