Las protestas de los trabajadores y dueños de restaurantes en la Ciudad de México no paran. Con la leyenda “Abrir o morir”, los afectados buscan reabrir sus locales con una capacidad de 30% para no quedar en bancarrota.
La tarde de este martes, los manifestantes expresaron su inconformidad en Polanco, la Zona Rosa y a lo largo de Paseo de la Reforma, entre otros puntos de la Ciudad de México, colocándose a las afueras de sus negocios con cucharón, cacerolas y carteles en mano.
El cierre derivado de la pandemia por Covid-19, afecta a dueños, cocineros, recepcionistas y meseros, quienes forman parte de una de las industrias más afectadas. Otras de las quejas que han externado estos establecimientos es la poca ganancia de ventas a domicilio, pues los servicios de reparto como Rappi, Uber Eats y Didi Food cobran tarifas elevadas.
Ante esta situación, el titular de la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP), José Antonio Peña Merino, explicó que, en una reunión con representantes de estas aplicaciones, les planteó de manera directa el difícil momento por el que atraviesan los restauranteros.
Encontramos una buena recepción, se comprometieron a revisarlo, entienden que son uno de los pocos sectores que no ha visto mermada su actividad económica durante los 10 meses (de pandemia)”, indicó Peña Merino en conferencia de prensa.
Agregó que este miércoles habrá otra reunión con las aplicaciones y el sector restaurantero para continuar la mesa de diálogo. El titular de la ADIP aceptó que no han tratado un porcentaje de reducción en las cuotas, pero dijo que es el inicio de un diálogo.
