LA VALETA, Malta.- Seis meses después del asesinato de la periodista y bloguera maltesa Daphne Caruana Galizia, 45 periodistas de todo el mundo retomaron su trabajo de investigación sobre la corrupción en este país europeo y esta semana publican sus conclusiones.
Pueden matar al mensajero, pero no el mensaje”, dijo Laurent Richard, periodista francés que hace tres años lanzó el proyecto “Forbidden stories” (‘Historias prohibidas’), para continuar las investigaciones de los periodistas asesinados o presos.
“Proyecto Daphne” es el primer producto de esta iniciativa. Durante seis meses, 45 periodistas de 18 medios de todo el mundo trabajaron juntos retomando la enorme cantidad de documentos que dejó Caruana Galizia, quien murió el 16 de octubre de 2017 en la explosión de un coche bomba, con 53 años. También se basaron en testimonios recopilados en la pequeña isla europea, de menos de 450 mil habitantes, y en otros países europeos. Caruana Galizia sacó a la luz algunos de los aspectos más oscuros de la política maltesa, arremetiendo con virulencia contra el primer ministro de la isla, el laborista Joseph Muscat, pero también con el jefe de la oposición. Sus ataques, a menudo duros y a veces personales, le valieron varias enemistades. No obstante, su blog lo seguían 300 mil lectores. El diario francés Le Monde, uno de los participantes en el “Proyecto Daphne”, publicó el miércoles dos de los artículos surgidos de esta investigación, uno sobre los presuntos vínculos entre Malta y el poder en Azerbaiyán y otro sobre la política maltesa de los “pasaportes de oro”. Caruana Galizia “había denunciado el establecimiento por el gobierno laborista maltés, en 2013, de un programa de venta de pasaportes copiado del modelo en auge en el Caribe, en [islas como] San Cristóbal y Nieves o Antigua y barbuda”, según el periódico francés. El “Proyecto Daphne” confirmó que “su crítica estaba ampliamente fundada”, añade. A cambio de un millón de euros, es posible obtener un pasaporte maltés con la condición de haber vivido en la isla durante al menos un año. Pero según los investigadores de “Forbidden stories” esta condición no se respeta. Por ejemplo, el multimillonario Arkady Yurievich Volozh, jefe de Yandex, el Google ruso, “compró en 2016 pasaportes para toda su familia” aunque no hubieran pisado la isla, según Le Monde. Quienes compran los pasaportes malteses buscan beneficiarse del régimen fiscal ventajoso de la isla, pero también lograr la ciudadanía europea, que le da acceso a los otros 27 Estados miembros de la UE. TB