La violencia e inseguridad en contra de quienes ejercen la libertad de expresión son ya algo cotidiano en el país. Muestra de ello es lo que ocurrió la tarde de este martes en Nanchital, Veracruz, en donde la periodista Romana Ortega estuvo a punto de ser privada de la libertad.
“Gracias a Dios estoy bien, agradezco a mis vecinos que en todo momento, a mi madre que aún está muy asustada”, publicó la directora del portal Ruta Istmo en su perfil de Facebook.
En el mensaje Romana Ortega detalló que uno de los sujetos que la abordó fue detenido, mientras que el otro logró escapar, por lo que dijo temer por su seguridad y la de sus cercanos.
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Además, refirió que acudió junto a algunos de sus familiares a denunciar lo sucedido ante la Fiscalía General de Justicia de Veracruz. Ni los primeros reportes ni la directora de Ruta Istmo refirieron si este intento de privación de la libertad está relacionado con su actividad en el medio digital que encabeza.
Hasta el momento ninguna autoridad, ni municipal ni estatal, se ha pronunciado sobre lo ocurrido la tarde en Nanchital.
Este hecho se da en un año en el que 15 periodistas han sido asesinados en nuestro país, y a solo unos días del ataque contra Ciro Gómez Leyva ocurrido en la Ciudad de México, caso que ha reavivado las críticas por el alto riesgo que corren quienes ejercen la libertad de expresión.
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