Ante la contaminación que las costas han sufrido en los últimos años, los animales marinos y plantas han encontrado una nueva forma de sobrevivir entre basura y plásticos que flotan en su hábitat.
Un estudio realizado por Nature Comunications señala que algunas especies costeras han logrado sustentar su vida e incluso crecer en el llamado “Gran parche de basura del Pacífico”.
“Está creando oportunidades para que la biogeografía de las especies costeras se expanda mucho más allá de lo que creíamos posible”, dijo Linsey Haram, autora principal del artículo y ex becaria postdoctoral en el Smithsonian Environmental Research Center (SERC).
Estos organismos que han logrado adaptarse de la mejor manera a los plásticos flotantes se han denominado como la “comunidad neopelagico”: “Neo” significa nuevo y “pelágico” se refiere al océano abierto, en oposición a la costa.
Claro que no es nuevo que haya vida en este tipo de balsas que se forman cuando las corrientes superficiales conducen la contaminación plástica de las costas a regiones donde las corrientes giratorias atrapan los objetos flotantes y con el tiempo se van acumulando; la novedad es que se trata de criaturas que suelen habitar las costas y no se suelen encontrar en un espacio así.
Ante el aumento a nivel mundial de la contaminación plástica, estas balsas han dado otra oportunidad de vida a las especies costeras y es una comunidad que a largo plazo podría colonizarse en mar abierto.