La violencia vicaria no es un tema nuevo o de tendencia. Este tipo de violencia de género ha ido en aumento y es cometida por el cónyuge o pareja para ocasionarle el mayor daño posible a la mujer, con lo que más quiere, sus hijas e hijos.
Es una expresión machista de la sociedad, con deseos de venganza, control y destrucción, en la que la madre es víctima indirecta por la violencia ejercida sobre sus descendientes, ocasionado en algunos casos, suicidios, hasta llegar a los feminicidios u homicidios.
La violencia vicaria, se presenta comúnmente en los procesos judiciales donde se exige la custodia de las y los hijos; al reclamar la pensión alimenticia; cuando se tramita el divorcio; o cuando una mujer inicia una nueva relación sentimental.
De acuerdo con la Encuesta Nacional: “Reconocimiento de la violencia vicaria en México”, el 76% de las mujeres que viven violencia vicaria han recibido amenazas por parte del agresor de no volver a ver a sus hijas e hijos.
El 94% de los casos el generador de violencia cuenta con recursos que le permiten favorecerse de los procesos legales e impiden acceso inmediato a la justicia.
Y en el 62% de los casos de violencia vicaria, el agresor ha simulado actos jurídicos o falsificación de documentos para lograr la autorización legal de autoridades que favorezcan la retención u ocultamiento de los menores.
En México, apenas nueve estados han legislado para atender la violencia vicaria, siendo estos: San Luis Potosí, Zacatecas, Yucatán, Hidalgo, Estado de México, Puebla, Baja California Sur, Sinaloa y Colima, mientras que en al menos 24 de las 32 entidades del país han presentaron iniciativas, como es el caso de laCiudad de México.
Próxima a discutirse en el Pleno del Congreso de la CDMX, la iniciativa pretende reformar la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y visibilizar la violencia vicaria como otra forma de violencia de género.
Definitivamente para la Ciudad de México, estas reformas representarán un gran avance, pues la entidad presenta el mayor número de casos de violencia vicaria, seguida del Estado de México, Jalisco, Nuevo León, Puebla y San Luis Potosí.
Esta Iniciativa, propone definir la violencia vicaria como una acción u omisión cometida por quien tenga o haya tenido una relación de matrimonio, concubinato o de hecho, en la cual existan hijas e hijos entre ambas personas, concepto que considero pudiera ser más claro y preciso en su definición, para garantizar su eficacia, prevenir y sancionar la conducta.
Lamentablemente la mujer ha sido revictimizada por las personas juzgadoras en los procesos judiciales, pues además de la violencia ejercida en su contra, deben aparentar ante el juez que están bien, para no ser acusadas de ser personas inestables y con trastornos mentales, cuando lo único que hacen es defender el derecho que tienen sus hijas e hijos de vivir al lado de su madre libres de violencia.
Por ello, las y los legisladores deberán modificar también el Sistema de Justicia de la CDMX, donde se establezca que las personas juzgadoras atiendan los asuntos y resuelvan con perspectiva de género y que las y los menores de edad, sean considerados sujetos de derecho y no objetos para ocasionar daño a las mujeres.
Se requiere además, capacitar a las personas juzgadoras a efecto de detectar a tiempo este tipo de violencia, dictar órdenes de protección oportunamente y brindar apoyo psicológico a las mujeres y menores que sufran violencia vicaria, protegiendo siempre el interés superior de la o el menor.
En el Estado de Puebla, un agresor fue vinculado a proceso por el delito de violencia vicaria, caso que es considerado el primero en México y en América Latina, esperemos que más estados de la República Mexicana se sumen a legislar para sancionar y erradicarla.