Invisibilizada la población callejera

6 de Enero de 2025

Zuly Feria

Invisibilizada la población callejera

Zuly Feria

La población callejera se encuentra invisibilizada al no contar con documentos oficiales que les permita insertarse en un empleo formar para mejorar su calidad de vida.

Las condiciones de extrema pobreza, los maltratos, las adicciones y abusos en el entorno familiar principalmente, han orillado a las personas en situación de calle a salir de sus hogares para buscar su libertad y un modo menos violento para vivir.

Es así como la calle se ha convertido para ellos en un lugar donde habitar, socializar, conseguir dinero, mantener adicciones, buscar comprensión y hasta formar una familia.

De acuerdo a datos de la Encuesta Sobre Discriminación 2021 del

Consejo Para Prevenir y Eliminar la Discriminación, las poblaciones callejeras son de los grupos sociales que más padecen exclusión ocupando el lugar número 13 entre los grupos que padecen

más discriminación.

Las personas que viven en situación de calle ponen en riesgo su vida

e integridad a diario, debido a que están expuestas a la explotación sexual por parte de otras personas u organizaciones criminales, además sufren del hostigamiento de la policía, de

la sociedad y son tratadas como potenciales delincuentes.

Dentro de los obstáculos que enfrentan las personas en situación de calle, se encuentra el carecer de documentos oficiales (acta de nacimiento, comprobantes de domicilio e identificación oficial), que les permita acceder y disfrutar de otros derechos fundamentales como el derecho a la identidad, a un empleo formal, a la salud y a la educación.

A pesar de que existen albergues públicos donde la población en situación de calle pudiera vivir, las condiciones de hacinamiento, de salubridad, discriminación, han ocasionado su desinterés para permanecer en dichos sitios, por eso prefieren “vivir en la calle”.

Atender a la población en situación de calle es una obligación del Gobierno y la sociedad, las instituciones están fallando,

no existen políticas públicas o reformas legislativas contundentes que den salida a este grave problema que sigue creciendo e invizibilizando a este sector vulnerable.

Se requieren cambios estructurales para lograrlo.

Mientras no se impulse a nivel nacional, un padrón confiable de la población callejera en las principales ciudades del país que permita conocer estadísticamente y de manera puntual las causas del problema y el porcentaje de población que se encuentra en esta grave situación, difícilmente se podrán dar soluciones puntuales y concretas para atender este grave problema.

Considero que a través de los albergues, se pueden realizar las gestiones ante las instituciones públicas para regularizar la condición legal de las personas en situación de calle y a través de capacitaciones para el empleo y terapias para dejar las adicciones se les abran las posibilidades de obtener un empleo formal y

ganarse el sustento en una actividad distinta a la de “traga fuegos”, “viene-viene”, “limpia parabrisas”, “vende dulces”, o delinquiendo. Todo dependerá sin duda,

de la voluntad que exista por parte del Estado para lograrlo.