Por sus actos los conocerás. Mucho se ha dicho de Alejandro Moreno Cárdenas, presidente nacional del PRI. Quienes lo han acusado de traicionar al priismo y aliarse con el partido en el poder, han acabado justamente haciendo lo que señalaban: saliendo por la puerta de atrás del tricolor y aceptando una “chambita” en el gobierno federal, mientras que el campechano sigue al pie del cañón, encabezando la alianza opositora más vigorosa que se ha constituido en el mayor freno al poder autoritario del presidente.
Propios y extraños reconocen la astucia, perseverancia e inteligencia con que actúa el exgobernador de Campeche, tanto así que todo el poder presidencial no ha podido con él y ha logrado concretar un frente opositor con PAN y PRD, ello a pesar de los augurios fatales que muchos hacían de esa alianza.
En situación contraria se encuentran quienes se decían opositores y fieles a sus principios y valores, pero que los han olvidado en aras de no vivir fuera del presupuesto. Tal es el caso de Quirino Ordaz, Claudia Pavlovich, Carlos Aysa y ahora Marco Mena.
El actual director de la Lotería Nacional dice que “Alito” se apoderó del PRI y que por eso hizo tan mal gobierno en Tlaxcala que se lo entregó a Morena y acabó trabajando para Morena.
Sin duda, se trata de una desvergüenza que no hace sino confirmar que entre 2012 y 2018 el PRI se llenó de oportunistas y deshonestos, que solo se sirvieron de ese partido para llegar al poder y que hoy hacen justamente lo mismo con el partido guinda.
Lo que no saben es que en el oficialismo tampoco los quieren y están a la espera de cualquier pequeño motivo para echarlos.
La coherencia, credibilidad y prestigio se construyen a lo largo de una trayectoria pública de esfuerzo y convicción, no de chapulineo ni mentiras.
Ante esta realidad, el liderazgo de Moreno Cárdenas se fortalece.
Presidenta del Senado responde a la Corte
La tlaxcalteca Ana Lilia Rivera, presidenta de la Mesa Directiva del Senado, señala que los procesos de nombramiento, ratificación o designación encuentran en la Constitución su asidero jurídico, pero la navegación para concretarlos requiere de la conjunción de múltiples factores: voluntad política, capacidad de negociación y altura de miras para construir consensos entre fuerzas con intereses, ideas y plataformas distintas.
“La Corte es consciente de esta complejidad, como lo ha evidenciado en numerosas resoluciones relacionadas con acciones del Poder Legislativo Federal. Como Senado de la República estamos comprometidos con dar cumplimiento a las sentencias de la Corte, siempre respetando estrictamente el principio de separación de poderes”, dice Ana Lilia Rivera.
“Este Senado seguirá haciendo lo necesario para lograr los acuerdos necesarios que colmen la resolución de la Corte, pues lo realmente importante es que las y los mexicanos puedan ejercer su derecho a la información plenamente”, adelanta la legisladora federal.
@jlcamachov