En lo que se ha convertido una costumbre legislativa, al cuarto para las doce se busca sacar el mayor número de pendientes.
A escasos cuatro días de que concluya el actual período ordinario de sesiones, los legisladores federales aceleran reuniones y acuerdos para aprobar los asuntos más urgentes de la agenda.
Mientras que en el Senado el tema central durante esta semana fue la seguridad, con el tema de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública y comparecencia del secretario del ramo, en diputados la Reforma Educativa marcó el andar de los coordinadores parlamentarios.
Entre escaños se comenta que el PRI ha dado un cheque en blanco al partido en el gobierno, para que se despache con la cuchara grande en las leyes secundarias que normarán el ingreso, permanencia y promoción de los docentes.
Son muchos los pendientes, pero poco el tiempo que queda.
Por ello, los legisladores federales dan por un hecho que de nueva cuenta celebrarán un período extraordinario en tiempo de receso para analizar, entre otros aspectos, la aprobación del Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 en el caso de los diputados y las leyes secundarias de la Guardia Nacional por parte de los senadores.
Evidentemente, ambos asuntos resultan ser de extrema urgencia para los intereses nacionales.
Cálculos legislativos establecen que será después del 2 de junio, es decir, de las elecciones, que los legisladores se reúnan en el extraordinario y hagan lo pertinente.
Con esta acción estaría prácticamente concluyendo el primer tercio de la actual legislatura y encaminándose a recibir el primer informe presidencial de gobierno.