La peor crisis sanitaria que México ha vivido en los últimos 100 años fue mencionada sólo en un par de minutos dentro del informe que el presidente Andrés Manuel López Obrador dirigió esta mañana con motivo de su tercer año de gobierno, en el que el mandatario utilizó la palabra pandemia en seis ocasiones.
El resumen que presentó López Obrador sobre la pandemia de Covid-19 no sólo excluyó los meses más críticos de la crisis, en la que México mantuvo la segunda letalidad más alta a nivel mundial con 12 defunciones por cada 100 pacientes, también dejó por fuera que durante la tercera ola de contagios por coronavirus se registró un máximo histórico de 20 mil 325 personas que enfermaron en un día.
Aunque el número de fallecimientos se mantuvo estable durante esta última ola, México registró 35 días con más de mil defunciones por Covid-19 entre el periodo de ambos informes; de hecho, el 20 de enero se convirtió en la fecha más letal de la pandemia con mil 454 decesos ocurridos en 24 horas, es decir que cada minuto de ese día se registró una muerte por coronavirus en el país.
Datos de la Dirección General de Epidemiología (DGE) muestran que la letalidad y mortalidad por Covid-19 en México se mantuvieron por encima de los promedios globales durante la mayor parte de la crisis sanitaria; además, el exceso de muertes en el país continúa siendo uno de los más altos a nivel mundial con más de 500 mil defunciones ocurridas durante la pandemia, por lo que estos indicadores se incrementarán una vez que la información se consolide.
Cada minuto del 20 de enero murió una persona por Covid-19 en México, lo que convierte a este día en el más letal de la pandemia con mil 454 defunciones totales.
El mandatario también explicó que la caída en la letalidad durante los últimos meses se debía a las tasas de vacunación en el país y aseguró que el 60% de los adultos habían recibido al menos una dosis contra el nuevo coronavirus, pero esta cifra es inexacta, ya que corresponde únicamente a la meta fijada por el gobierno federal y no a la población total.
De hecho, expertos en salud pública han destacado que contar con una sola dosis anticovid no es suficiente para lograr alguna protección contra la enfermedad, por lo que el número de habitantes cubierto ante este padecimiento se reduce a 33 millones 922 mil, lo que representa un 37.9% de la meta trazada por el gobierno federal, y un 26.9% respecto a la población total.
López Obrador reafirmó su compromiso de que todos los adultos del país cuenten al menos con un esquema parcial de protección contra el nuevo coronavirus antes del 31 de octubre, una meta que requiere la aplicación diaria de 506 mil vacunas de primera vez, una cifra 101.4% mayor que la reportada durante la última semana de agosto, y que además no incluye a las personas que deberán recibir su segunda dosis durante ese periodo.
El mandatario también celebró el arribo de más de 100 millones de dosis anticovid para enfrentar la crisis sanitaria; sin embargo, datos oficiales señalan que existe un retraso promedio de 20 días entre la llegada de estas vacunas y su aplicación, esto sin contar los casi 13 millones de biológicos de distintas marcas que siguen extraviados sin que ninguna autoridad pueda explicar su paradero exacto o por qué continúan almacenados.
Esperanzas. Durante su gira por Baja California, el 26 de junio pasado, el presidente López Obrador se comprometió a inaugurar hasta 200 hospitales IMSS-Bienestar para el final de su sexenio.
Las otras carencias
Como parte de su tercer informe el presidente López Obrador también publicó una serie de videos en los que busca resaltar los logros de su gobierno, entre los que incluye la atención médica universal y gratuita, un mensaje que reforzó esta mañana al decir que “se dejó de entregar concesiones a particulares en minas, agua, hospitales”.
Sin embargo, datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) demuestran que la atención médica en el sector privado aumentó en 4.2 millones durante el sexenio de López Obrador, y que de forma adicional otro millón y medio buscó ayuda en algún consultorio adscrito a farmacias.
El Sistema de Información de la Secretaría de Salud (SINAIS) informó que el número de persona que se atendieron en hospitales públicos se redujo un 46.7% lo que representa 11 millones menos de usuarios de este tipo de servicios entre 2019 y 2020; pero esta cifra podría aumentar considerablemente durante este año debido a la saturación de los centros médicos que provocó la segunda ola de la pandemia.
Atención. En 2020, las consultas para siete enfermedades cayeron 48.6%, es decir, 42.2 millones de consultas menos que en 2019; aunado a una menor atención, el gasto de bolsillo de los hogares aumentó en 40% de manera general.
La falta de atención en hospitales públicos también ha causado que el número de enfermedades prevenibles que se detectaban anualmente cayera entre 20 y 27%, lo que representa un riesgo considerable para la carga de morbilidad en el país, ya que las complicaciones por no recibir un diagnóstico temprano se duplican por cada año que este se retrase.
Pero no sólo la atención en hospitales públicos ha disminuido, también lo ha hecho el abastecimiento de medicamentos a través de los sistemas de seguridad social, lo que impactó directamente en las finanzas domésticas; estadísticas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) indican que el gasto en salud aumentó un 40% entre 2018 y 2020.
Datos del colectivo Cero Desabasto demuestran que tan sólo en los primeros cuatro meses de este año se han acumulado 773 reportes por falta de medicamentos en todas las instituciones públicas, lo que representa un aumento de 1,167% respecto al mismo periodo de 2019, cuando López Obrador acababa de asumir la Presidencia.