Jonathan Nácar y Luis León
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó un posible daño por más de 139 millones de pesos en la construcción del hangar presidencial en el Aeropuerto de la Ciudad de México, al otorgar contratos a las empresas que ofrecieron propuestas más caras, sobrecostos en productos y se realizaron pagos indebidos.
En las conclusiones de la auditoría, que fiscalizó un contrato de obra pública y tres de servicios, se exige la recuperación del dinero y se inicien las investigaciones correspondientes, porque el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) “no cumplió las disposiciones legales y normativas aplicables”.
El proyecto de ampliación y modernización de la plataforma presidencial comprendió tres fases: la construcción del estacionamiento y los edificios de alojamiento; la construcción del pórtico, de la caseta de acceso, del edificio de seguridad y destacamento, los garitones, el hangar 787 y la reubicación del monumento denominado “El Mexicano”; y la construcción del edificio de mantenimiento, de las direcciones de Operaciones y de Recursos Materiales y la Dirección General de Administración, así como la remodelación del conjunto presidencial y de los hangares 1 al 5, para contar con un espacio seguro, moderno y con las facilidades tecnológicas de vanguardia.
La ASF sostiene que se adjudicaron directamente los contratos de obra “a empresas con propuestas que resultaron caras y mal integradas, lo que no posibilitó el cumplimiento del objetivo del proyecto y generando un sobrecosto en la ejecución de los trabajos y servicios de 141 millones 327 mil 600 pesos”.
foco rojo. Las contrataciones realizadas entre dependencias y entidades públicas son un área propicia para el desvío de recursos públicos, alertó la ASF.
