Los padres de Daniel Picazo, joven linchado por pobladores de Huauchinango, Puebla, aseguraron que los elementos de la policía que acudieron al lugar de los hechos “se negaron” a salvar a su hijo.
Nicandro Picazo y Angélica González narraron al periodista Ciro Gómez Leyva, cómo un testigo intentó ayudar a Daniel cuando éste ya se encontraba amarrado y golpeado, acusado presuntamente ser un “robachicos”.
Sacó de su pantalón la credencial que lo identificaba como trabajador de la Cámara de Diputados y pidió a los policías que lo ayudaran, pues no había cometido ningún crimen. Sin embargo, los uniformados lo acusaron de ser su cómplice, indicaron los padres del joven.
“Tú eres su cómplice, tú estás de acuerdo con él, y se lo quitaron, se lo arrebataron y fue donde ya le prendieron fuego”, señaló la madre de Daniel Picazo.
Según los padres, el testigo que intentó ayudar a su hijo se presentó de manera voluntaria a declarar ante la Fiscalía.
La declaración de los padres se contrapone con la versión del alcalde de Huauchinango, Rogelio López Angulo, quien afirmó que los elementos de la policía que atendieron la emergencia - que eran seis - eran muy pocos para actuar en contra de los pobladores y que, incluso, salieron golpeados.
“Fue imposible para la policía, empezaron a golpear a los elementos de la policía, los dejaron muy golpeados y los amenazaron con que seguían ellos”, declaró el edil.
Aunque López Angulo aseguró que están trabajando con la Fiscalía General del Estado para identificar y castigar a los responsables, los padres de Daniel Picazo acusaron una “lentitud” de la policía, tanto en las primeras investigaciones como en el reconocimiento del cuerpo. EJ
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