Con una fortuna de aproximadamente 81 mil miles de millones de dólares y una tasa de impuestos nula, Carlos Slim —el hombre más rico de México y dueño de una gran parte de las telecomunicaciones del país— podría ser la clave para acabar con la pobreza, la falta de empleo y la desigualdad.
Pero no se trata de la aplicación de sus programas de apoyo: el Comité de Oxford de Ayuda contra el Hambre (Oxfam, por sus siglas en inglés) reveló que un impuesto tan sólo de 5 % sobre su riqueza neta podría traducirse en cuatro mil 100 millones de dólares, suficiente para emplear a un cuarto de millón de maestros, por poner un ejemplo.
En su más reciente informe, titulado “La supervivencia de los más ricos”, la confederación internacional pone el dedo en la llaga y señala las profundas desigualdades que genera la existencia de personas que amasan miles de millones de dólares mientras en todo el mundo, millones de personas luchan por sobrevivir con pocos dólares al día.
Entre las razones, se explica, está el control que mantienen los millonarios sobre las comunicaciones, el entretenimiento y la ciencia, lo que les permite hacer “presión blanda” y cabildeo con los gobiernos para mantener su estilo de vida.
En este sentido, cabe recordar que Carlos Slim —cuya fortuna terminó en un récord histórico al cierre del 2021— mantiene no solo un imperio de telefonía, sino que también recibe miles de pesos por servicios bancarios, de comunicaciones y tiendas departamentales y restaurantes, entre otros rubros que incluso se ofrecen en otros países.
En la región latinoamericana, durante los
momentos más críticos de la pandemia de Covid, la riqueza de los más privilegiados aumentó 21 % en promedio, mientras que el Producto Interno Bruto (PIB) creció únicamente 3.9 % durante ese tiempo y al menos 12 millones de personas viven en la pobreza.
En contraste, la fortuna de Slim en México creció 42 %, aproximadamente a 787 millones de dólares al mes. “La riqueza de los súper ricos latinoamericanos creció cinco veces más rápido que la de los países de América Latina y el Caribe”, señaló la organización.
Oxfam también señaló que a finales del año pasado, América Latina y el Caribe registraron un total de 91 “súper ricos” cuya fortuna acumulada suma 398 mil 200 millones de dólares, y aunque Brasil concentra el mayor número de millonarios, nuestro país ocupa el puesto número 2, y las sumas de los más acaudalados en su interior es la más extensa de toda la región.
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