El dictamen que concluyó hace 24 días la Auditoría Superior de la Federación (ASF) es demoledor para un organismo estratégico para el desarrollo agroalimentario del país y protección alimentaria para los más pobres, Segalmex, debe aclarar 5 mil 640 millones 592 mil 176 mil 100 pesos.
El monto, que es uno de los más altos para una sola dependencia y sólo se refiere a la gestión financiera de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex).
Las conclusiones de la revisión de la ASF establece que la conclusión se basa en que la gestión de Ignacio Ovalle no pudo acreditar a los auditores en más de un año de revisiones, entre otras cosas, la salida de efectivo, inventarios de granos faltantes, la compra de productos de la canasta básica que se compraron y no ingresaron a los almacenes, contratos que no se acreditó su cumplimiento de servicios y operaciones, pagos sin facturas y pagos sin justificar en la compra de leche.
Ante las anomalías encontradas en Segalmex, la ASF emitió 15 recomendaciones, tres solicitudes de aclaración, siete promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria que deberá atender la Función Pública y ocho pliegos de observaciones que servirán para abrir carpetas de investigación en la Fiscalía General de la República.
En la mañanera de este lunes, tras conocerse este monto, el presidente Andrés Manuel López Obrador –quien ha reconocido su amistad con Ignacio Ovalle--, aseguró que se responderá a la Auditoría y que, si hay corrupción “se va a investigar”, sea quien sea.
Ni la canasta básica encuentran
El primer punto que alerta la Auditoría es en el de inventarios, en el que se determinó una diferencia de 185 millones 192 mil 200 millones de pesos, “por faltantes de maíz y frijol, entre el importe registrado en las actas de levantamiento físico de inventarios y los saldos contables”.
Tampoco Selgamex, en todo el año de revisión de la ASF, fue capaz de proporcionar evidencia “de la existencia física en los almacenes de las compras de productos de la canasta básica por 27 millones 103 mil 500 pesos”, sostiene el órgano.
Sobre la misma canasta básica, los auditores descubrieron que el pedido con el número GA02686/19, de estos productos por 4 millones 884 mil pesos simplemente “no se acreditó su entrada a los almacenes” de Segalmex.
En el documento dado a conocer el domingo, la Auditoría identificó “salidas de efectivo no identificadas por Segalmex por 104 millones 388 mil pesos”.
Un producto vital para los productores es el pesticida y los auditores descubrieron que un pedido de este producto, el número A/009/2020, por 49 millones 999 mil 300 pesos, Segalmex no acreditó que lo recibió.
Granos sin comprobar
En la revisión de las adquisiciones de maíz por 531 millones 481 mil 200 pesos, y de frijol de pequeños productores por 190 millones 966 mil 800 pesos, la ASF no recibió de parte de Segalmex “las boletas de recepción y liquidación de los productores, que soporten la entrada del grano a los Centros de Acopio”.
Además el organismo pagó en demasía 47 millones 493 mil 400 pesos, que excedieron el tonelaje permitido en los ciclos productivos 2020 y 2019; y superar el precio de garantía en el ciclo productivo 2019.
En los documentos de la ASF, se plantea que “en la revisión de los pagos de maíz de medianos productores, arroz y trigo, registrados en tres, seis y cuatro pólizas de registro contable por 820 millones 476 mil 100 pesos, 104 millones 490 mil 900 pesos y 428 millones 37 mil 300 pesos, respectivamente, no se proporcionó la documentación soporte de las ventas de los productores a la industria (“facturas”), para determinar el cálculo del diferencial aplicado entre el precio de referencia fijado por Segalmex y el precio de garantía del subsidio otorgado bajo dicho concepto”.
Segalmex, sin cumplir con la ley y los lineamientos, pagó bajo el concepto de “complemento” a maíz de medianos productores, arroz y trigo, explica la Auditoría, 779 millones 204 mil 400 pesos, sin que el organismo pudiera aclarar y argumentar, en toda la revisión de la ASF, “el pago por el subsidio otorgado por dicho concepto”.
Ni siquiera el organismo federal, detalla la Auditoría, fue capaz de acreditar, con documentos, que los recursos transferidos a Liconsa por mil 445 millones 401 mil 800 pesos, “correspondieron efectivamente a los 520 millones 109 mil 83 litros captados a pequeños y medianos productores de leche”.
Contratos injustificados
La Auditoría Superior revisó varios de los contratos, uno de ellos el CSS/014/2020, que se refiere a fletes de productos, identificó “pagos por servicios realizados fuera de la vigencia del contrato por 9 millones 249 mil 800 millones de pesos. Además de penalizaciones que indebidamente Segalmex no aplicó a la empresa por 2 millones 144 mil pesos.
Los auditores también se toparon con cuatro convenios --CSS/023/2020, CSS/028/2020 y CSS/045/2020 y del convenio modificatorio del contrato CSS/018/2019--, en los que el organismo que debe supervisar la producción, almacenamiento y venta de productos de primer necesidad, “no acreditó la designación de enlaces, la administración y resolución de problemas, el control de asistencias careció de confiabilidad y no proporcionó evidencia de los informes de actividades de los trabajos de campo, entre otros, por lo que no se acreditó la prestación de los servicios por 909 millones 979 mil 400 pesos”.
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