México, en la incertidumbre

24 de Diciembre de 2024

Jose Luis Camacho
Jose Luis Camacho

México, en la incertidumbre

jose luis camacho

En los recientes meses, nuestro país ha atravesado un periodo de creciente incertidumbre, caracterizado por decisiones cuestionables y una falta de acatamiento a las resoluciones judiciales por parte de la Administración Pública Federal.

Esta situación se ha visto exacerbada por un Congreso que, en su mayoría, ha aprobado reformas mal diseñadas, ocurrencias y auténticos atentados contra los derechos humanos. Estas dinámicas no solo amenazan la estabilidad política y social, sino que también ponen en riesgo el bienestar de todos los ciudadanos.

La Administración Pública Federal tiene la responsabilidad de implementar políticas que promuevan el bienestar general y garanticen el respeto a las instituciones democráticas. Sin embargo, hemos sido testigos de un desprecio alarmante por las resoluciones judiciales, que son fundamentales para el equilibrio de poderes y la defensa del Estado de derecho.

Cuando una administración decide no acatar sentencias, se envía un mensaje claro: la justicia puede ser ignorada si así lo desea el poder ejecutivo. Esta falta de respeto por las instituciones no solo erosiona la confianza en el sistema, sino que también sienta un precedente peligroso para futuras decisiones gubernamentales.

Por otro lado, el Congreso, al aprobar reformas mal diseñadas y ocurrencias, ha contribuido a agravar la incertidumbre. Muchas de estas reformas han sido impulsadas sin un análisis adecuado de sus implicaciones, lo que ha llevado a consecuencias negativas en áreas críticas como la educación, la salud y el medio ambiente. En lugar de abordar problemas estructurales, se han implementado medidas superficiales que a menudo benefician a intereses particulares en detrimento del bien común. Aún más preocupante es la aprobación de reformas que representan auténticos atentados contra los derechos humanos.

La protección de los derechos fundamentales debe ser una prioridad para cualquier gobierno, y las decisiones que atentan contra ellos no solo generan descontento social, sino que también pueden llevar a conflictos y crisis humanitarias. La historia ha demostrado que el debilitamiento de los derechos humanos es un camino peligroso que puede llevar a la represión y a la injusticia.

La incertidumbre que vivimos no es solo una cuestión política; tiene un impacto directo en la vida de las personas. La falta de confianza en las instituciones puede desincentivar la inversión, afectar la economía y generar un clima de inestabilidad que repercute en todos los niveles de la sociedad. Es crucial que tanto la Administración Pública como el Congreso asuman la responsabilidad de sus decisiones y trabajen en pro de una gobernanza más transparente y responsable.

Para lograr un cambio, es fundamental promover un diálogo abierto y constructivo entre los distintos sectores de la sociedad, así como fomentar la participación ciudadana en la toma de decisiones. La rendición de cuentas y el respeto a las instituciones deben ser pilares en la reconstrucción de la confianza pública.

Nuestro país se encuentra en un momento crítico en el que las decisiones de la Administración Pública y del Congreso determinarán el rumbo que tomaremos en el futuro. Es imperativo que se priorice el respeto a la justicia, los derechos humanos y el bienestar de la ciudadanía. Solo así podremos superar la incertidumbre y construir un país más justo, equitativo y en paz. La responsabilidad recae en todos nosotros: ciudadanos, funcionarios y legisladores, para exigir un cambio y trabajar juntos por un futuro mejor.

@jlcamachov