Basándose en dos artículos de la normativa interna, fue como José Antonio Romero, director interino del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), argumentó la remoción de Alejandro Madrazo Lajous como titular de la región centro de la institución. Sin embargo, la normativa citada no ofrece sustento de la salida del académico.
ejecentral tiene una copia del oficio que José Antonio Romero leyó a Madrazo Lajous para confirmarle su salida. En él se refiere a los artículos 33, fracción XXIV, del estatuto general de la institución y el artículo 16 del manual de la misma.
El primero faculta al director para “probar los nombramientos, contratos y remociones de los servidores públicos de la Asociación”; mientras que el segundo dice que “El Director General acordará los nombramientos, contratos y remociones de los servidores públicos adscritos a las Unidades Administrativas para que el Centro cumpla con su objeto, de acuerdo con lo establecido en la normatividad aplicable en materia de servicios personales”.
La normativa citada por Romero en el oficio no ofrece sustento de la remoción del académico. Se trata únicamente de su facultad como director para remover personal.
Además, en el oficio sólo se especifica “pérdida de confianza”, aunque esa figura no está ni en el estatuto ni el manual del CIDE.
El pasado 5 de octubre, Madrazo Lajous fue removido como director del CIDE región centro, lo que desconcertó al personal académico de la institución y hasta a los exalumnos de la misma quienes se manifestaron en diversos pronunciamientos para exigir que se aclarara el motivo de la salida del académico.
Este periódico contactó a Madrazo Lajous y a José Antonio Romero, pero indicaron que no darían comentarios.
Fuentes consultadas por ejecentral al interior del CIDE aseguran que desde que se conoció la noticia se envió un comunicado a José Romero para que explique las razones de la salida de Madrazo Lajous, pues de acuerdo con el estatuto de la institución “en cualquier caso, la remoción deberá estar fundada y motivada”.
