A dos años de que se decretara la pandemia por coronavirus, la Organización Mundial de la Salud (OMS) actualizó por tercera vez su plan estratégico de preparación para añadir cinco requerimientos necesarios para lograr salir de la fase crítica de esta emergencia antes de que termine el año.
Entre las recomendaciones más urgentes incluyen mantener la vigilancia epidemiológica en un nivel alto en todos los países para poder detectar variantes de interés o brotes agudos, así como continuar con los esquemas de pruebas diagnósticas masivas.
Además, el plan insiste en lograr la vacunación de más del 70% de la población mundial, así como aumentar el seguimiento de los padecimientos asociados a Covid prolongado y sus efectos en los sistemas de salud nacionales.
Este nuevo plan incluye los tres escenarios globales con mayor posibilidad de ocurrencia para los expertos de esta organización, quienes descartan que el coronavirus vaya a desaparecer por completo, y al contrario, apuestan por una transmisión endémica con menor gravedad que las olas iniciales.
Los expertos señalan que en el mejor escenario la inmunidad de las vacunas será permanente, por lo que no harán falta refuerzos periódicos, pero también alertan sobre un panorama crítico en el que falta de inmunización en algunas regiones permita el surgimiento de una variante más agresiva que retrase los esfuerzos globales.
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, advirtió que “esta actualización podría, y debería ser la última”, e insistió en que la pandemia es una crisis que requiere la intervención de todos los países miembros para poder llegar a su fin.
