#Negocios Nuevo récord en trabajadores mal pagados

2 de Noviembre de 2024

#Negocios Nuevo récord en trabajadores mal pagados

Al menos 28.5 millones de trabajadores en México ganan entre uno y dos salarios mínimos, 10 millones más de los que había a comienzos del gobierno de Peña Nieto y el doble de los que se tenían con Felipe Calderón

El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que el lema “primero los pobres” es un principio rector de su gobierno y que “ningún modelo económico puede tener éxito si se sustenta en el empobrecimiento de las masas”. Pero la realidad es distinta: hoy México tiene más trabajadores que ganan menos.

Información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) muestra que, en el tercer trimestre del año, 28.5 millones de trabajadores (51.6% del total) gana hasta 206 pesos o dos salarios mínimos, cifra superior a los 18.5 millones que había en el mismo periodo del gobierno de Enrique Peña Nieto y a los 14.5 millones que había en el mismo periodo del gobierno de Felipe Calderón.

Los datos del Inegi se dan a conocer en el contexto de la presión de algunos sindicatos estadounidenses, que siguen reclamando la baja remuneración de los trabajadores mexicanos, en el marco de las negociaciones para ratificar del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

La revelación de Inegi sobre el ensanchamiento de la capa de trabajadores mal pagados coincide con una iniciativa de un centenar de empresas privadas para pagar a sus empleados como mínimo seis mil 500 pesos al mes desde diciembre, bajo el programa voluntario “Empresas por el Bienestar”. Además, la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) está en los últimos detalles para dar a conocer el incremento salarial para 2020.

En este contexto, la información del Inegi muestra que en los primeros nueve meses del gobierno de López Obrador, la población trabajadora que percibe ingresos de entre tres y cinco salarios mínimos (de 310 a 514 pesos) por día y los trabajadores o empleados que cobran más de 515 pesos diarios registraron niveles mínimos históricos.

De los más de 8.49 millones de trabajadores que cobraron más de tres y hasta cinco salarios mínimos con Felipe Calderón, récord máximo histórico (cuarto trimestre de 2007), 3.86 millones o 45.5% de la gente ocupada dejó de percibir ese monto salarial en el tercer trimestre de 2019.

Incluso, en el segundo trimestre del año, ese nivel de paga registró su nivel mínimo histórico (o al menos desde que el Inegi hace la medición).

Para la población ocupada con ingreso superior a los cinco salarios mínimos, en el periodo enero-marzo de 2019 se registró otro mínimo histórico con 1.74 millones de personas con esa percepción económica. Ese número contrastó con 5.29 millones de trabajadores que en el tercer trimestre de 2006, con Vicente Fox, recibieron una paga similar.

Comparando ese nivel de ingreso, de más de cinco salarios mínimos, en un tercer trimestre en los tres últimos sexenios, los datos del Inegi muestran que con López Obrador hubo 1.83 millones menos de trabajadores con esa paga respecto al sexenio de Enrique Peña Nieto y 3.38 millones menos en comparación con el mismo periodo de Felipe Calderón.

Esa precarización de los salarios, impactan el consumo. Así lo muestran las cifras de los agremiados de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) y la venta de vehículos nuevos en el país, según los datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).

19.9 por ciento de trabajadores reciben el salario mínimo en México.

Círculo vicioso

La desaceleración económica global se pronunció más en México. En los primeros nueve meses del año, el Producto Interno Bruto (PIB) registró cero crecimiento. En el segundo y tercer trimestre el PIB reportó tasas negativas. Algo así no se había visto desde la caída registrada en 2008, año en el que hubo una sacudida financiera mundial que inició con la crisis de hipotecas en Estados Unidos.

En ese escenario, el director del Programa de Investigación Aplicada de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef), un think tank que nació con el apoyo del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Jorge Sánchez Tello, señala que los salarios en el país son producto de un círculo vicioso.

“En México, los salarios son sumamente bajos y eso es muy malo para la economía. En los últimos 20 años, la economía creció en promedio 2.0%. Obviamente así, los salarios no dan para más”, comentó el economista.

El analista señaló que la magnitud del empleo informal sin prestaciones económicas ni registro ante la autoridad tributaria, “el menor empleo formal permite que se precarice el salario. Además, los esquemas de contratación (outsourcing) no son adecuados para la economía. Todo esto impacta para que la gente gane menos y así compran menos cosas; además, las empresas no ganan lo que tendrían que ganar y por eso crecen menos y generan menos empleos, por lo que pagan menos a sus trabajadores. Es un círculo”, detalló Sánchez Tello.

Adicionalmente, se debe considerar la restricción del gasto por parte del gobierno federal, lo que generó el despido de personal. Tal es el caso de Andrea, exempleada de lo que hoy es la Fiscalía General de la República (FGR), que dirige Alejandro Gertz Manero.

Su despido, asegura, generó un giro radical en su vida. Comentó que no hubo indemnización por el despido de casi tres años de labores. “Mi vida cambió mucho. Estaba estudiando Administración Pública en una universidad privada y me tuve que salir. Ya llevaba la mitad de la carrera”, explicó quien espera un día regresar a laborar en el sector público.

La exempleada dijo que en el círculo en que se mueve “ todo está detenido”. No hay oportunidades laborales ni en la iniciativa privada ni en el gobierno. Después de varios meses sin empleo y dos hijas que mantener, aceptó un trabajo sin prestaciones sociales y con una paga 40% inferior a lo que ganaba antes.

Esa precarización del salario que vive Andrea se refleja en un menor consumo. Al menos, ahora son muy escasas sus visitas familiares a las salas de cine y el consumo de alimentos en restaurantes quedó en el olvido. Incluso, dice que por primera vez en su vida, se vio imposibilitada de hacer compras en la campaña promocional del Buen Fin.

Esa precarización de los salarios se evidencia en las ventas de las tiendas con más de un año de operación (técnicamente llamado: ventas mismas tiendas) de los agremiados de ANTAD. En los primeros 11 meses (diciembre 2018-octubre de 2019) del actual gobierno sólo han registrado tres incrementos reales (descontada la inflación).

Esos tres incrementos reales superan al comportamiento negativo que registraron en el mismo periodo del sexenio de Enrique Peña Nieto, el cual sólo reportó un mes con alza en ventas. Sin embargo, ese nivel de facturación a tiendas igual es inferior al registrado en los primeros 11 meses del sexenio de Felipe Calderón, donde la ANTAD registró siete incrementos reales y sólo cuatro contracciones.

Otro indicador adelantado de la economía es la venta de vehículos nuevos. Datos de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) muestran que en los últimos 31 meses, de abril de 2017 a octubre de 2019, la comercialización tiene número negativos en 29 meses.

Iniciativa privada, un grano de arena

En México, el salario mínimo se paga a 10.95 millones de trabajadores, es decir a casi uno de cada cinco (19.8%) del personal ocupado en el país, mientras que en Estados Unidos, el salario mínimo federal se paga a menos del 1.0 por ciento. Asimismo, en México la paga es de 103 pesos diarios, que equivale a menos de 70 centavos de dólar por hora, mientras que en la Unión Americana se paga en 7.5 dólares (145 pesos) la hora, que en una jornada de ocho horas equivale a 60 dólares o mil 162 pesos al día.

Así, el 6 de noviembre se anunció el lanzamiento oficial de “Empresas por el Bienestar” donde 100 empresas (108 compañías hasta el 19 de noviembre) se comprometieron a pagar al menos seis mil 500 pesos brutos al mes, más prestaciones sociales a sus trabajadores de menor rango salarial.

Ese compromiso privado y voluntario representará un incremento superior a 110%, respecto de los tres mil 80 pesos del salario mínimo vigente.

Con esa iniciativa empresas como Ernst & Young, Tec de Monterrey, Citibanamex, BBVA, Nestlé, las universidades UVM y UNITEC (Laureate Education), Arca Continental, Estafeta, Fábrica de Jabón La Corona, Grupo Tequilero Weber, Hutchison Ports, J Walter Thompson, Metalsa, Ogilvy. OCC, Orbia (antes Mexichem), Publicis WW, Urrea Herramientas, Zurich, entre otras tantas pagarán como mínimo alrededor de 220 pesos diarios, más del doble de los 103 pesos actuales.

Un dato que llama la atención, es que la mayor empleadora privada en el país, Wal-Mart México, todavía no entra al programa “Empresas por el Bienestar”. En México, el año pasado, la mayor cadena de supermercados facturó alrededor de 499 mil 300 millones de pesos, 8.0% más respecto a 2017. Ese nivel de facturación supera ampliamente a varios rivales comerciales juntos.

Un punto a destacar es que el grueso de las empresas en México (99.8%) son pequeñas y medianas empresas (Pymes) que generan el 78% del empleo nacional, según datos del Inegi para 2018.

En ese escenario, en una reunión de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) con la Confederación de Cámaras Industriales en la República Mexicana (Concamin) señaló que para dignificar el salario de los trabajadores, el salario mínimo debería ser entre 128 y 132 pesos (entre 6.61 y 6.82 dólares) diarios a partir del próximo año.

1.0 por ciento de trabajadores reciben el salario mínimo en EU.