La violencia volvió a las calles de París. Por tercera noche consecutiva, los ciudadanos tomaron las calles en protesta por la reciente muerte de un joven de 17 años a manos de la policía. Desde los suburbios de París, hasta la comuna de Nanterre —donde tuvo lugar el homicidio—, cientos de franceses han incendiado vehículos y edificios, en una larga jornada que ha desplegado al menos a 40 mil agentes de seguridad.
“No culpo a la policía, culpo a una persona: la que quitó la vida a mi hijo”, señaló Mounia, madre del joven acribillado, quien señaló sus orígenes como posible causa de los hechos. “(El agente) vio un rostro árabe, un pequeño chaval, y quiso arrebatarle la vida”, fueron sus palabras poco después de encabezar una marcha de protesta que terminó con choques con la policía, mobiliario urbano quemado y lanzamiento de gases lacrimógenos.
Su postura es compartida por otros manifestantes. “Siempre se ataca a los mismos, a los negros y los árabes, a los barrios pobres. Matan a un chico de 17 años así, sin motivo. Esta muerte nos produce odio”, dijo a medios uno de los asistentes a las protestas en Nanterre.
PUEDES LEER: Francia vive segunda noche de disturbios por muerte de joven
En un contexto en el que aún persisten las protestas en contra de la reforma de pensiones del presidente Emmanuel Macron, el gobierno francés podría verse desbordado. Los cuerpos de seguridad prevén más actos violentos en las próximas noches, con acciones dirigidas a las fuerzas del orden y los símbolos del estado, y el mandatario tuvo que mantener una reunión de crisis matutina con ministros de alto rango después de una jornada especialmente violenta este día.
Por su parte, según palabras de su abogado, el policía que cometió el asesinato pidió perdón a la familia de la víctima. “Mi cliente está extremadamente conmocionado (...) está destrozado, no se levanta por la mañana para matar gente. No quiso matar”, detalló.
Hasta el cierre de esta edición, los tres días de enfrentamientos entre manifestantes y policías han dejado al menos 250 personas arrestadas, toda vez que no se vislumbra un fin cercano al conflicto.
SIGUE LEYENDO |