Síndrome coqueluchoide: ¿qué es y por qué Nuevo León ocupa el segundo lugar en casos?

El síndrome coqueluchoide, también conocido como tosferina, es una enfermedad respiratoria que afecta principalmente a niños menores de cinco años, aunque puede presentarse a cualquier edad.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la tosferina es una de las enfermedades infantiles más frecuentes a nivel mundial y ocupa el quinto lugar entre las principales causas de muerte prevenibles con vacunación.

¿Qué es el síndrome coqueluchoide?

La tosferina es una enfermedad inmunoprevenible que ha estado presente durante siglos. Aunque en la actualidad se siguen registrando brotes importantes, su diagnóstico temprano y tratamiento oportuno son fundamentales para su control. Sin embargo, a nivel mundial, la baja sospecha clínica ha dificultado su detección y manejo.

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Los lactantes no inmunizados o con esquemas de vacunación incompletos son los más vulnerables a esta enfermedad.

En Nuevo León, durante las primeras seis semanas del 2025, se han reportado 44 casos de tosferina. Según cifras oficiales, el estado solo está por debajo de la Ciudad de México, donde se han atendido 45 pacientes en el mismo periodo.

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Nuevo León y el aumento de casos de tosferina

El gobierno de Nuevo León informó que, en lo que va del 2025, se han acumulado 44 casos de síndrome coqueluchoide, lo que representa un aumento del 340 % en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Por otro lado, el Gobierno de México detalló que esta enfermedad se caracteriza por episodios violentos de tos, acompañados de un sonido particular durante la inspiración, conocido como “canto de gallo”, término derivado del francés coqueluche.

La tosferina afecta principalmente a niños menores de cinco años, con un predominio en mujeres. Su transmisión ocurre por contacto directo con las gotas expulsadas por un paciente infectado al toser o estornudar.

Los síntomas incluyen:

De cinco a diez episodios de tos intensa, acompañados de un silbido característico.

• Coloración violácea posterior a los accesos de tos.
• Lagrimeo.
• Vómito.
• Jadeo.
• En algunos casos, convulsiones y un estado general de malestar.

El Boletín Epidemiológico indica que en las primeras seis semanas del 2024 se reportaron solo 10 casos de esta enfermedad en Nuevo León, mientras que en 2025 la cifra ha aumentado a 44, lo que representa un incremento del 340 %.

En 2024, Nuevo León ocupaba el quinto lugar en casos de tosferina a nivel nacional, pero en 2025 ha escalado al segundo puesto.

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A nivel nacional, el número de casos ha aumentado un 158.1 % en comparación con el año anterior, pasando de 148 a 382 casos en las 32 entidades federativas.

Estados más afectados en 2025

• Ciudad de México – 45 casos
• Nuevo León – 44 casos
• Guanajuato – 35 casos
• Baja California – 29 casos
• Aguascalientes – 24 casos
• Chihuahua – 24 casos
• Estado de México – 24 casos
• Jalisco – 20 casos
• Oaxaca – 17 casos
• Querétaro – 16 casos
• Coahuila – 14 casos
• Sonora – 14 casos
• Hidalgo – 9 casos
• Morelos – 8 casos
• San Luis Potosí – 8 casos
• Zacatecas – 8 casos
• Yucatán – 7 casos
• Campeche – 6 casos
• Chiapas – 6 casos
• Guerrero – 5 casos
• Quintana Roo – 5 casos
• Veracruz – 3 casos
• Baja California Sur – 2 casos
• Durango – 2 casos
• Sinaloa – 2 casos
• Tabasco – 2 casos
• Tamaulipas – 2 casos
• Nayarit – 1 caso

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