Resaca tras fiestas decembrinas: ¿Cómo afecta al cuerpo y cómo evitarla?
Pexels: Andrea Placquadlo
¿Te has preguntado por qué el alcohol no solo te deja malestar físico, sino hasta ansiedad? La resaca va más allá y aquí te explicamos qué pasa en el cuerpo, cómo prevenirla y cómo recuperar tu energía tras una noche de excesos
La temporada de celebraciones decembrinas está llena de cenas, brindis y reuniones que, en muchos casos, conllevan un exceso en el consumo de alcohol.
Esto trae consigo la temida resaca, un conjunto de síntomas físicos y emocionales que pueden arruinar el día siguiente.
Dolor de cabeza, fatiga, náuseas y sensibilidad a la luz son los más comunes, pero un síntoma menos discutido es la ansiedad post-alcohol. ¿Por qué ocurre esto y qué podemos hacer para prevenirlo?
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¿Qué provoca la resaca?
La resaca es un fenómeno complejo que afecta múltiples sistemas del cuerpo y se origina principalmente cuando el nivel de alcohol en la sangre disminuye hasta llegar a cero.
Durante este proceso, ocurren varias reacciones en el organismo:
Deshidratación: El alcohol inhibe la vasopresina, una hormona que controla la retención de agua en los riñones. Esto aumenta la producción de orina, causando deshidratación y provocando sed, fatiga y dolor de cabeza.
- Baja de glucosa: El hígado transforma el glucógeno (azúcar almacenada) en glucosa para metabolizar el alcohol, reduciendo los niveles de azúcar en sangre. Esto puede desencadenar temblores y sensación de agotamiento extremo.
- Influencia en neurotransmisores: El alcohol afecta el ácido gamma-aminobutírico (GABA), un neurotransmisor que relaja el sistema nervioso. Al retirarse el alcohol, la reducción del GABA y el aumento de glutamato generan un estado de hiperactividad cerebral, asociado con ansiedad y pensamientos acelerados.
- Acetaldehído y toxicidad: El hígado metaboliza el alcohol en acetaldehído, una sustancia tóxica que puede generar náuseas, fatiga e irritabilidad mientras el cuerpo lo elimina.
De acuerdo con David Nutt, neuropsicofarmacólogo del Imperial College de Londres, “el alcohol produce un efecto calmante al incrementar el GABA, pero una vez que se elimina del cuerpo, la ansiedad puede aparecer, incluso en personas que no suelen ser ansiosas”.
Esto explica por qué, además de los malestares físicos, algunas personas experimentan irritabilidad o preocupación excesiva al día siguiente.
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Consejos para evitar la resaca
La única forma garantizada de evitar una resaca es no consumir alcohol, pero si decides brindar durante las fiestas, estas estrategias pueden ayudarte a minimizar sus efectos:
- Hidrátate adecuadamente: Alternar bebidas alcohólicas con vasos de agua ayuda a evitar la deshidratación y diluye las concentraciones de acetaldehído en la sangre.
- Come antes y durante la ingesta de alcohol: Ingerir alimentos ralentiza la absorción del alcohol en el torrente sanguíneo y ayuda a mantener los niveles de glucosa.
Controla la cantidad de alcohol: Limitar el consumo a las cantidades recomendadas (una copa al día para mujeres y dos para hombres) reduce significativamente el riesgo de resaca.
- Elige bebidas claras: Las bebidas oscuras, como el whisky y el ron, contienen más congéneres (subproductos de la fermentación) que pueden agravar los síntomas.
- Descansa adecuadamente: Aunque el alcohol induce el sueño, interfiere con las fases reparadoras, por lo que es importante dormir lo suficiente.
Cabe destacar, que el doctor Stephen Holt, director de la clínica de adicciones del Hospital Yale-New Haven, en Connecticut, Estados Unidos, recomienda no beber para combatir los síntomas de ansiedad o temblores, ya que esto perpetúa el ciclo de dependencia.
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Cómo recuperarse tras una noche de excesos
Si los síntomas de la resaca ya aparecieron, estas medidas pueden ayudarte a sentirte mejor:
- Rehidrátate con soluciones electrolíticas para compensar la pérdida de minerales.
- Consume alimentos ligeros, como caldos o frutas, para restaurar los niveles de glucosa.
- Descansa lo suficiente y evita esfuerzos físicos intensos mientras el cuerpo se recupera.
Menos alcohol, menos consecuencias Como puedes ver, la resaca no solo afecta el cuerpo físicamente, sino también el equilibrio emocional y mental.
La clave está en beber con moderación, hidratarse y escuchar al cuerpo y tal como afirma Edwin Kim, especialista en adicciones de la Universidad de Pensilvania: “cuanto menos alcohol consumas, menor será la probabilidad de sufrir las consecuencias al día siguiente”.
Kay
