El desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) y su impacto en los empleos es una realidad cada vez más tangible. El Foro Económico Mundial anticipó desde el año pasado que 14 millones de empleos desaparecerían a lo largo de un lustro conforme las empresas adoptaran nuevas tecnologías de Inteligencia Artificial.
Además, diversos estudios estiman que la Inteligencia Artificial tendrá un efecto directo en el 40% de los puestos de trabajo alrededor del mundo; sin embargo, este impacto no significa necesariamente algo negativo, ya que los expertos anticipan la generación de nuevas posiciones y tareas.
Para Joan Frías, director general de la unidad de consultoría Truth Finder Unit, la incorporación de la Inteligencia Artificial representa una oportunidad única que no reemplazará totalmente a la humanidad y sus conocimientos, sino que será una herramienta de consulta, apoyo y actualización en todas las áreas del conocimiento.
“La verdad es que no importa el ámbito en el que te desarrolles, si eres abogado o arquitecto, vas a necesitar educarte en Inteligencia Artificial, porque el tema es que esta tecnología va a permear básicamente todos los campos del quehacer humano”, comenta.
A diferencia de otros cambios en el ecosistema digital, existe la certeza de que la Inteligencia Artificial transformará también los puestos de trabajo de alta preparación y no sólo aquellos donde se completen tareas automatizadas.
“El ejemplo más claro es en la agricultura, donde muchos procesos que se tenían que hacer a mano, plantita por plantita, ahora los hace la Inteligencia Artificial junto con la tecnología. Donde más habrá cambios es en los trabajos operativos. En el mediano plazo ya no será necesario contratar a alguien para puestos con cajas de cobro e incluso en ciertos procesos contables, pero también afectará a los creativos del video, la fotografía, la música, entre otros”, comenta Frías.
Al respecto, el experto también anticipa que esta clase de inteligencia no sólo sembrará cambios en la manera en que tradicionalmente se trabajaba, sino que será una habilidad a considerar al momento de contratar personal.
“Estamos viendo que la Inteligencia Artificial ya se está integrando en los procesos de las empresas. Entonces, cuando lleguen las y los candidatos a entrevistas y algunos tengan habilidades para incorporar la inteligencia artificial a su trabajo, a su quehacer diario, pues van a tener un puntito extra sobre quien no la posea”, expresa.
Caldo de cultivo
Para Joan Frías, quien también es director de Planeación Estratégica de McCann Worldgroup México, en el país existe un caldo de cultivo para que la inteligencia artificial permee en la industria; no obstante, es necesario que los trabajadores reciban capacitación, que las empresas la promuevan y que el gobierno y las instituciones impulsen un marco regulatorio.
“A México han llegado empresas que están apostando por crear inteligencia artificial o invertir en tecnologías que trabajen con la misma. Hay una gran apertura e interés en nuestro país y la posición estratégica que tenemos forma parte del caldo de cultivo que se está formando. Pero, a la vez, eso significa que tenemos que prepararnos y educarnos más”, aclara Frías.
Para el experto en negocios internacionales, hace falta “entrarle con más brío al entendimiento de los usos, la parte ética, la gobernanza y el manejo y cuidado de los datos”.
Es evidente, dice, que México no atienda este tema “al ritmo de la Unión Europea, Estados Unidos o China, porque en esos países ya tienen ciertas regulaciones al respecto”, pero siempre será determinante dar los primeros pasos y avanzar hacia la dirección correcta.