La sombra tras Donald Trump
Con el argumento de reducir miles de millones de dólares “de déficit” en el gobierno, Elon Musk emprendió una serie de acciones consideradas “ilegales”, pues interfieren con instituciones de gobierno; las protestas y demandas no se han hecho esperar
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Desde hace algunos años, el empresario e inversor Elon Musk comenzó a cobrar cada vez más relevancia en el ámbito geopolítico. La adquisición de Twitter le permitió no solo ser más conocido, sino incluso influir en miles de personas y empujar la narrativa conservadora en todo el mundo.
Pero su logro más importante ha sido, definitivamente, su incursión en la política estadounidense, gracias al financiamiento de la campaña del presidente Donald Trump. De acuerdo con The Washington Post, el magnate donó 288 millones de dólares a la campaña de 2024, y su recompensa tras la victoria republicana fue ser nombrado líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés).
Se trata de una comisión asesora presidencial de los Estados Unidos que no forma parte de los demás departamentos ejecutivos federales, dado que para su creación no fue necesaria la aprobación del Congreso. Por el mismo motivo, el magnate no recibe un sueldo, pero, a cambio, ostenta un puesto extremadamente cercano al presidente Donald Trump.
El objetivo, de acuerdo con lo dicho por Trump y el propio Elon Musk, es eliminar regulaciones para reducir los gastos y aumentar la eficiencia del gobierno, así como reestructurar el gobierno federal.
De esta forma, desde su posición como “empleado especial del gobierno” –tal como lo describió la Casa Blanca–, Musk ha tenido la oportunidad de interferir directamente en diversas áreas del gobierno estadounidense, y una de las primeras ha sido el Departamento del Tesoro.
A finales de enero, los ciudadanos estadounidenses se enteraron de que Musk y su equipo tomaron el control del sistema de pagos del Tesoro, la plataforma encargada de producir todo el dinero de Estados Unidos, así como los sellos de correo. El sistema también dirige las finanzas federales y supervisa los bancos nacionales y las instituciones de ahorro, por lo que la noticia de que toda esa información y poder se encontraban en manos del empresario causó sorpresa e indignación entre muchos.
Los pagos de Seguridad Social y Medicare también forman parte de las erogaciones de este departamento, junto a los salarios federales, pagos de contratos gubernamentales y reembolsos de impuestos, entre otros.
“La corrupción y el despilfarro están siendo erradicados en tiempo real”, fue el argumento que esgrimió ante los señalamientos. Pero hasta el momento se desconoce el motivo por el que DOGE buscó acceso al sistema de pagos.
Al cierre de esta edición, Musk no ha podido afianzar su control en el Departamento del Tesoro debido a una orden de un juez que impide que DOGE tenga acceso a los datos personales y financieros de millones de estadounidenses. La orden también establece que cualquier persona que haya tenido acceso a los datos debe destruir inmediatamente el material descargado.
Musk vs. otros departamentos
Su batalla en el Departamento del Tesoro no ha sido la única. Desde la semana antepasada, un grupo de empleados del Departamento de Educación fue puesto en licencia, como parte de los intentos de DOGE de recortar el gasto federal. Los trabajadores fueron notificados por medio de cartas enviadas por el propio departamento, que también les informó de la suspensión de sus cuentas de correo electrónico. Y aunque han estado recibiendo sus respectivos cheques de pago, lo cierto es que se desconoce el tiempo que seguirán siendo remunerados.
Se estima que al menos 55 personas se encuentran actualmente en licencia pagada, y entre ellas hay trabajadores de carrera de alto nivel que han laborado durante décadas, abogados de derechos civiles que manejan quejas de discriminación estudiantil, un empleado que trabaja en una oficina de subvenciones y un miembro del equipo de inteligencia artificial que ayuda al departamento a comprender la IA en la educación. “No existe tal departamento en el gobierno federal”, dijo al respecto, tras recibir señalamientos por parte de los afectados.
Cabe destacar que muchos estudiantes ya habían expresado su preocupación por el control de Musk en el Departamento del Tesoro, debido a que también maneja información y pagos por préstamos estudiantiles.
En este sentido, sus objetivos han sido firmemente respaldados por Trump. De acuerdo con medios de comunicación estadounidenses, funcionarios de la administración presidencial ya han discutido una orden ejecutiva que cerraría todas las funciones de la agencia que no estén escritas explícitamente en los estatutos.
Asimismo, la interrupción de pagos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés) lleva el sello de Musk, aunque cabe aclarar que no fue el único artífice.
La organización, que tiene más de 60 años de funcionamiento y cuyo objetivo es distribuir la mayor parte de la ayuda exterior de carácter no militar, enfrentó una campaña de desinformación por parte del magnate y sus allegados. Entre otras cosas, aseguraron que financió viajes de celebridades como Angelina Jolie a Ucrania o que llegó a pagarle a Jeffrey Epstein, un magnate financiero conocido por sus delitos sexuales. Ambas afirmaciones han sido desmentidas por medios especializados.
Bajo el liderazgo de Musk, DOGE ha congelado programas de ayuda y promovido reducciones de personal por medio de propuestas de dimisión generalizadas y amenazas de despido, acciones que muchos políticos y activistas señalan de “inconstitucionales”.
Así, fiscales generales demócratas en 19 estados presentaron un recurso legal para frenar la intromisión del empresario en las instituciones estadounidenses, a la vez que un juez federal en Rhode Island declaró que la administración Trump ha violado una orden que levanta una congelación general de fondos federales.
“La congelación amplia, categórica y generalizada de los fondos federales es (...) probablemente inconstitucional y ha causado y continúa causando un daño irreparable a una gran parte de este país”, se puede leer en el dictamen.
Junto a estos programas, el magnate sudafricano ha tenido un papel importante en el desmantelamiento de los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI, por sus siglas en inglés). Ya desde antes de la victoria de Trump, el empresario se había mostrado en contra de estos, asegurando que “destruían el arte” en sectores como el de los videojuegos.
A través de sus redes sociales, Musk ha propagado desinformación sobre los mismos. Es el caso de una de sus publicaciones del pasado 8 de enero, en la que compartió un post que responsabilizaba a DEI de los incendios mortales en California.
“DEI era el enfoque del jefe de bomberos, y el departamento y la ciudad gastaron dinero en DEI mientras que la maleza peligrosa no se había limpiado y los hidrantes no tenían agua”, compartió.
Poco después de que Trump fuera investido como presidente de Estados Unidos, Musk celebró la orden ejecutiva en la que se ponía fin a los mandatos federales de diversidad, equidad e inclusión.
Sudáfrica en la mira
Aunado a su intromisión en los programas gubernamentales, el magnate ha dejado ver su interés en su país natal. Bajo lo que muchos acusan de “consejos de Musk”, el presidente Trump afirmó que Sudáfrica está confiscando tierras y “tratando muy mal a ciertas clases de personas”. El mandatario se refería a los afrikáneres, un grupo étnico de origen europeo descendiente de colonizadores neerlandeses durante el siglo XVII.
Y es que Elon Musk también ha participado en una narrativa que asegura que el reparto de tierras en Sudáfrica perjudica a los afrikáneres, aunque lo cierto es que, en la actualidad, la mayoría de los territorios agrícolas están en manos de personas blancas: un estimado de tres cuartas partes del país.
De igual manera, el hombre más rico del mundo ha descrito Sudáfrica como una nación con “leyes de propiedad racistas” e incluso ha acusado al gobierno de Cyril Ramaphosa de no detener “un genocidio” contra los granjeros blancos, escudándose en los asesinatos de algunos ciudadanos blancos, los cuales, si bien están reconocidos por las autoridades, no constituyen un ataque desproporcionado contra dicha población.
Tras estos acontecimientos, el presidente Trump anunció que implementará recortes financieros al gobierno
de Sudáfrica.
Inconformidad entre ciudadanos
Todas estas acciones por parte del empresario han generado molestia entre los ciudadanos estadounidenses, muchos de ellos beneficiarios de los programas que recibieron recortes.
El poderío de Elon Musk se ha reflejado incluso en los medios de comunicación, tal como se vio en la portada de la revista Time, que muestra al empresario sudafricano sentado en el escritorio presidencial.
Ante lo que muchos especialistas han considerado una “provocación”, Trump se abstuvo de comentar y, tras el cuestionamiento de un reportero sobre si tenía alguna opinión al respecto, respondió únicamente: “no”.
Símbolos. En su número más reciente, la revista Time mostró al empresario en el escritorio presidencial, junto a las banderas de EU y del presidente.
En una de sus últimas apariciones, Musk señaló que Estados Unidos vive en “una burocracia”, y aseguró que la Casa Blanca “iría a la quiebra” sin los recortes que ha implementado.
Manifestaciones. Las acciones de Musk han desnecadenado protestas en Filadelfia, California, Minnesota, Michigan, Texas, Wisconsin e Indiana, entre otras ciudades.
Preferencia. En una reunión reciente, Trump ordenó a agencias de EU colaborar con Musk.
(La USAID) es un nido de víboras marxistas radicales de izquierda que odian Estados Unidos (...) una organización criminal y malvada (...). Es tiempo de que muera”
Elon Musk
Líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental.
El avance de Musk
Desde el control del sistema de pagos federales hasta la suspensión de USAID, Elon Musk y DOGE han intervenido múltiples agencias gubernamentales, generando controversia
Departamento del Tesoro. Junto a su equipo, obtuvo acceso al sistema de pagos federal responsable de manejar billones de dólares en gastos gubernamentales.
Departamento de Educación. Además de los recortes en esta agencia, ha buscado acceso a los datos de préstamos estudiantiles federales y eliminado contratos.
Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Cerró la agencia. Tras una serie de alegatos y demandas, se protegieron los contratos de dos mil 200 trabajadores, pero se suspendió todo el trabajo humanitario de USAID a nivel internacional.
Centros de Servicios de Medicare y Medicaid. “Aquí es donde está ocurriendo el gran fraude monetario”, publicó Musk en redes sociales.
Agencia Federal para el Manejo de Emergencias. Despidió a cuatro personas y aseguró que la organización gastó decenas de millones de dólares para alojar a inmigrantes en hoteles de Nueva York.
Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. Un miembro de DOGE ingresó a la oficina encargada de pronosticar el clima, investigar y analizar los datos climáticos y meteorológicos y monitorear y rastrear eventos climáticos extremos como huracanes. Obtuvo información sobre los dispositivos electrónicos.
Trabajadores de gobierno. Se planea retirar a más de dos millones de trabajadores federales, incluidos empleados de la CIA.
Oficina de Protección Financiera del Consumidor. DOGE ingresó a las oficinas en Washington DC y exigió acceso a ciertas aplicaciones.
Administración Federal de Aviación. Obtuvo acceso a tecnologías de la FAA para realizar “rápidas actualizaciones de seguridad.