La Portada | Ejecutivo y Legislativo, el reto de los primeros 100 días

El Congreso de la Unión se perfila como un actor central en los primeros 100 días de gobierno de Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ocupar la presidencia de México. Durante una reciente reunión, los legisladores y la nueva mandataria acordaron cinco prioridades legislativas que se prevén impactarán de manera significativa la economía del país.

Las propuestas incluyen la implementación de tres programas sociales: apoyo económico para mujeres de 60 a 64 años, becas para estudiantes de educación básica en escuelas públicas y atención médica a domicilio para adultos mayores. Además, se discutirá la reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y las leyes secundarias relacionadas con la reforma del Poder Judicial.

La magnitud de estos cambios demandará una asignación considerable de recursos que deberá reflejarse en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2025. Sheinbaum tiene hasta el 15 de noviembre para presentar su proyecto de presupuesto, y según diputados de Morena consultados por ejecentral, se estiman asignaciones por al menos 68 mil millones de pesos. De esta suma, 60 mil millones estarían destinados a los nuevos programas sociales, mil millones a la nueva Secretaría de las Mujeres, y siete mil millones para la selección de nuevos ministros, jueces y magistrados.

“En los primeros 100 días vamos a sentar las bases de la nueva constitucionalidad del segundo piso de la transformación. Va a haber un nuevo marco legal. Vamos a aprovechar el legado que el presidente Andrés Manuel López Obrador desarrolló a lo largo de estos seis años”, comentó Alfonso Ramírez Cuéllar, vicecoordinador de los diputados de Morena. Esta perspectiva resalta la intención de continuar con la visión transformadora de la administración saliente, mientras se establece un nuevo enfoque hacia la movilidad social.

Identificado como un aliado estratégico de Sheinbaum, Ramírez Cuéllar ha sido señalado como una pieza clave para la tramitación del presupuesto, recordando su rol crucial en 2018, cuando López Obrador asumió la presidencia y él lideraba la Comisión de Presupuesto en San Lázaro. Con una agenda que promete redibujar el mapa social y económico de México, los próximos días serán decisivos para la nueva administración.

Prioridades legislativas

En una reciente entrevista con ejecentral, Alfonso Ramírez Cuéllar, coordinador de los diputados de Morena, dejó claro que la agenda legislativa en las próximas semanas estará dominada por las reformas Claudia Sheinbaum. Estas reformas deben ser aprobadas a más tardar en noviembre para asegurar su inclusión en el Paquete Económico 2025.

Entre las iniciativas clave se encuentran la creación de la Secretaría de las Mujeres y la Secretaría de Ciencia, además de modificaciones a Segalmex, la integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, y nuevos programas sociales que se implementarán desde el inicio de su gobierno. Ramírez Cuéllar destacó que “después del primero de octubre, México va a abrir una nueva etapa, un nuevo gobierno”, caracterizado por un “piso parejo” y un enfoque en la movilidad social ascendente, que promueva el diálogo y el respeto a los derechos humanos.

Sin embargo, el coordinador Ricardo Monreal subrayó que los legisladores de Morena están comprometidos con la aprobación de las 18 reformas que el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el 5 de febrero. Estas deben ser consideradas durante el primer periodo ordinario de sesiones, que podría extenderse hasta el 31 de diciembre, aunque los morenistas buscan concluirlo el 15 de diciembre.

Hasta la fecha, el Congreso ha avalado cinco de estas iniciativas: la reforma al Poder Judicial, la integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa, el reconocimiento de los pueblos indígenas y afromexicanos como sujetos de derecho público, el aseguramiento de que el salario mínimo no esté por debajo de la inflación, y la constitucionalidad del programa Jóvenes Construyendo el Futuro.

Además, Monreal destacó la necesidad de apoyar a Sheinbaum en el diseño del Sistema Nacional de Cuidados, que busca promover una mayor equidad laboral, acelerar la transformación de escuelas de tiempo completo en zonas vulnerables, y establecer centros públicos de cuidados y educación inicial para la primera infancia.

Arturo Ávila, vocero de la bancada de Morena en San Lázaro, anticipó la propuesta de 19 reformas constitucionales que abren la puerta a un futuro más equitativo. “La doctora Sheinbaum tendrá, por ejemplo, el plan más ambicioso de la historia del México moderno con las visitas médicas domiciliarias”, resaltó Ávila, indicando que más de 25 mil médicos estarán involucrados en este sistema de prevención de enfermedades, llevando la atención médica directamente a los hogares de los mexicanos. Con estas reformas, se espera que el nuevo gobierno no solo marque un cambio de estilo, sino una transformación estructural en el territorio mexicano.

Los retos de Sheinbaum

El nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum enfrenta un reto monumental: la distribución de los recursos públicos. Este desafío se vuelve aún más crítico a medida que los compromisos dejados por Andrés Manuel López Obrador absorben gran parte del Presupuesto de Egresos de la Federación 2025.

Según miembros de la Cuarta Transformación (4T), la Secretaría de Hacienda continúa trabajando en el Paquete Económico, y ya se ha descartado la posibilidad de una reforma fiscal.

En su lugar, se enfocan en la redistribución de los recursos disponibles. Sin embargo, no se ha presentado una estrategia clara para incrementar la disponibilidad de fondos públicos, lo que plantea preguntas sobre cómo se cumplirán las promesas de Sheinbaum frente a los compromisos heredados, como el programa de Pensión para el Bienestar de Adultos Mayores, cuyo costo estimado asciende a 583 mil millones de pesos, según los Precriterios Generales de Política Económica 2025.

El documento titulado 100 pasos para la transformación detalla los compromisos de Sheinbaum y sus propuestas para lograr sus objetivos. Incluye la continuidad de la austeridad republicana, que permitió ahorrar tres mil 85 millones de pesos en 2022.

La presidenta plantea una mejora en la recaudación de impuestos como una solución fundamental, apoyándose en políticas públicas innovadoras y el uso de tecnología para minimizar la evasión fiscal. “Se mejorará la recaudación con estrategias de inteligencia fiscal para fomentar el pago oportuno, incrementar la base tributaria sin aumentar tasas ni crear nuevos impuestos, y mejorar la presencia fiscal”, señala. Sin embargo, su plan no incluye un cálculo sobre cuántos recursos se podrían obtener ni en qué plazo se lograría.

Con la presión de equilibrar los compromisos previos y los nuevos proyectos, Sheinbaum deberá mostrar su capacidad para gestionar los recursos de manera eficiente, o podría enfrentar tensiones políticas y sociales en su intento de transformar la estructura económica de México.

En la agenda del nuevo Congreso de la Unión, la legislación secundaria al Poder Judicial se presenta como una de las principales prioridades. Este esfuerzo se realizará en estrecha coordinación con el gobierno de Claudia Sheinbaum, quien ha expresado su compromiso con una transformación del sistema judicial mexicano.

Los legisladores de oposición han expresado preocupaciones sobre los conflictos políticos y legales que podría generar esta reforma. Un punto crítico es la financiación de las elecciones de jueces, ya que Morena y Sheinbaum proponen usar recursos de los fideicomisos de la Suprema Corte, que no se han podido eliminar legalmente.

En entrevista con ejecentral, la diputada de Morena y exsubprocuradora Jurídica de la Procuraduría General de la República, Mariana Benítez Tiburcio, subrayó que la obligación de los legisladores es aprobar las leyes secundarias antes de diciembre. En este periodo también se etiquetarán los recursos necesarios para la elección de ministros, jueces y magistrados.

Benítez anticipó que en 2025, Sheinbaum presentará su propuesta para fortalecer las fiscalías y defensorías públicas, lo que marcará una segunda fase de transformación del Poder Judicial. “Va a ser una reforma igual, prioritaria, pero en este periodo no creo que llegue”, comentó. Esta segunda fase se enfocará en la procuración de justicia, un ámbito que Benítez considera urgente, dada la significativa rezago existente, especialmente en las fiscalías estatales, las cuales investigan aproximadamente el 90% de los delitos en el país.

La reforma al Poder Judicial se presenta no solo como un reto legislativo, sino como un test crucial de la capacidad de Sheinbaum y su administración para implementar cambios significativos en un sistema que ha sido objeto de críticas durante años. Con la oposición en alerta y el tiempo en su contra, el gobierno deberá maniobrar con cuidado para evitar tensiones políticas que podrían obstaculizar su agenda transformadora.

¿Sello propio o continuidad?

A medida que Claudia Sheinbaum asuma la presidencia, se enfrenta a un desafío monumental: consolidar su propia identidad política mientras promete dar continuidad a la transformación iniciada por Andrés Manuel López Obrador. Aunque ha ratificado a varios funcionarios nombrados por su predecesor, diputados clave como Alfonso Ramírez Cuéllar, Ricardo Monreal y Mariana Benítez afirman que Sheinbaum no es una extensión de López Obrador, y que su liderazgo se medirá a partir de sus acciones en los primeros 100 días de gobierno.

Mariana Benítez enfatizó la presión que enfrentará la nueva presidenta desde el primer día. “La van a juzgar y criticar debido a la polarización existente”, señaló. Además, destacó que estas críticas a menudo son machistas, buscando descalificar a una mujer en el poder. “Estamos iniciando una nueva era, donde las mujeres ocupan las posiciones más altas de poder en este país”, afirmó.

Ramírez Cuéllar indicó que la transformación busca construir un “segundo piso” de oportunidades al “crear piso parejo y generar igualdad de oportunidades y derechos para todos”. Uno de los objetivos ambiciosos de esta gestión es la eliminación de la pobreza extrema, un desafío que ha eludido a anteriores gobiernos. Un objetivo ambicioso es eliminar la pobreza extrema, que ha aumentado de 8.7 a 9.1 millones entre 2018 y 2022, según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

Frente a la pregunta de cómo planean acabar con la pobreza extrema, Ramírez Cuéllar afirmó: “Estamos buscando llegar a 2030 sin ningún pobre extremo. Tenemos definida una estrategia clara para focalizar esfuerzos, especialmente en niños y niñas, tanto en zonas rurales como urbanas”. Resaltó la importancia de fortalecer los ingresos de los hogares mexicanos a través de mejoras salariales, reparto de utilidades y políticas sociales consistentes.

La etapa que se abre con Sheinbaum promete ser decisiva. A medida que la nueva presidenta navega por la polarización política y las expectativas sociales, el éxito de su administración podría depender de su capacidad para forjar un camino que no solo continúe la transformación, sino que también lo redefine en términos de inclusión y equidad. Con un enfoque claro y metas ambiciosas, la administración de Sheinbaum se prepara para dejar su huella en la historia de México.