La mano de Pegasus y EU en Colombia
El gobierno de Estados Unidos admitió el uso del software de espionaje en territorio colombiano, lo que desató indignación y cuestionamientos del presidente Gustavo Petro, quien se enteró la semana pasada
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Software Pegasus
/EjeCentral
A pocas semanas de que Donald Trump asuma la presidencia de Estados Unidos por segunda vez, surge una nueva polémica entre ese país y Colombia. Se trata de la revelación de que el gobierno de Joe Biden financió la compra del software Pegasus para supuestamente luchar contra el crimen organizado en el país latino, bajo un esquema de “cooperación antinarcóticos”.
›Sin embargo, a la fecha no está claro el uso real de dicho software de espionaje de origen israelí, ya que durante su compra y uso no se informó al entonces presidente Iván Duque, y el actual mandatario, Gustavo Petro, fue notificado apenas hace unos días.
Según el diario El Tiempo –medio que tuvo la primicia– el programa fue adquirido en dos pagos de 5.5 millones de dólares y fue entregado a través de vuelos directos desde Tel Aviv a Bogotá. Días más tarde, el pasado viernes 8 de noviembre, la información fue confirmada por el gobierno estadounidense, en una reunión de primer nivel en la Casa Blanca, en Washington, a la que asistió Daniel García-Peña, embajador de Colombia.
“Lo que nos aseguraron es que efectivamente fueron recursos norteamericanos utilizados para la adquisición del software Pegasus, que se hizo en las fechas que se han reportado en los medios, que fue para combatir el narcotráfico y su utilización estaba dirigida exclusivamente a los cárteles de la droga de Colombia y México”, reveló García-Peña.
“Una vez empezaron a tener sospechas sobre el uso de Pegasus a nivel mundial, este programa fue suspendido y, de hecho, el gobierno del presidente Biden en 2023 emitió una orden ejecutiva prohibiendo que en el futuro se adquieran este tipo de herramientas de software”, puntualizó, al tiempo que dejó claro que exigió conocer todos los datos que se recogieron.
Según el embajador, el programa no fue entregado a ningún funcionario ni líder colombiano. En su lugar, las autoridades del país indicaban a los miembros de inteligencia estadounidenses cuáles eran los objetivos o personas que debían interceptar, “bajo total supervisión colombiana”.
La compra, según altos funcionarios de la administración del presidente Petro, se realizó con fondos destinados a la lucha contra el narcotráfico.
“Hubo un primer pago, que fue en junio, de 5.5 millones. De acuerdo con la información emitida, la alerta de operaciones sospechosas nos indica que el dinero llegó en efectivo, en dólares estadounidenses”, aseguró por su parte Luz Adriana Camargo, fiscal general de la Nación.
Así, mientras Estados Unidos se ha negado a ofrecer más detalles, se espera que la Fiscalía General de la Nación llame a declarar a quienes formaron parte de la línea de mando de la Policía durante el gobierno de Iván Duque, con el fin de delimitar claramente el alcance del software, cuyo uso podría ser considerado ilegal.
Respuesta presidencial
Mientras las autoridades colombianas investigan el caso, el propio presidente Petro se pronunció al respecto, al señalar que “si es cierto que el pasado gobierno no sabía, en este caso el presidente y el ministro de Defensa, entonces hay un superpoder policial por encima del poder democrático, es decir, elementos de una dictadura”.
El presidente no se ha limitado a posicionarse en contra de la adquisición del software y su uso en territorio colombiano, sino que también ha teorizado que se pudo haber adquirido otro programa espía. “No tengo una teoría pública sobre Pegasus. La que tengo, que por ahora me reservo hasta comprobarla, no la he dicho por simple prudencia. Creo que no sólo se compró un software de espionaje. Pegasus solo sirvió de modelo para un gobierno sin respeto por los derechos humanos”, expresó en sus redes sociales.
Desde que se dio a conocer la noticia, el pasado 10 de noviembre, el mandatario ha hecho hincapié en la necesidad de defender la soberanía de Colombia y en la diferencia entre ciberdefensa y espionaje. “No es lo mismo tener un software para cazar mafiosos que hacerlo sin orden judicial, a menos que la Constitución de 1991 no sirva para nada, a menos que nuestra democracia se haya debilitado”, fue otro de sus mensajes.
Pero el conflicto diplomático aún podría empeorar, ya que medios de comunicación han resaltado que el gobierno estadounidense sabía que el uso del programa de espionaje Pegasus era ilegal antes de “donarlo” a Colombia.
Esto se supo debido a que tres años antes de la adquisición del programa en Colombia, el Departamento de Justicia de Estados Unidos había expuesto los abusos de la tecnología en Panamá, en documentos que detallan que la inteligencia estadounidense abusó del programa para interceptar ilegalmente las comunicaciones en dicho país.
En este sentido, el panorama bajo la nueva administración de Trump parece incierto, toda vez que el empresario, junto a sus asesores, ha asegurado que combatirán el narcotráfico en Latinoamérica. El aumento de 53% en la producción de cocaína durante 2023 será una de las principales preocupaciones de la nueva administración, así como la migración y la relación entre Petro y Nicolás Maduro, presidente de Venezuela y considerado enemigo de Estados Unidos.