El panorama electoral en Estados Unidos se ha visto intensamente agitado. No es sólo una cuestión de cifras o encuestas, sino de una verdadera guerra de estrategias, influencias y controversias. A días de la jornada decisiva, la tensión está en su punto más alto, con Donald Trump y Kamala Harris en el centro de la atención pública, ambos al lidiar con factores que podrían cambiar el destino de la nación.
Las actuales campañas presidenciales han estado marcadas por declaraciones incendiarias, involucramiento de figuras famosas, nombramientos inesperados, protestas ciudadanas y hasta juicios por injerencia electoral y abuso sexual. Ahora, a pocos días de concluir, sus protagonistas, Donald Trump y Kamala Harris, se encaminan hacia un final en el que puede pasar cualquier cosa.
›La temporada electoral, considerada de las más polémicas en la historia estadounidense, finaliza el martes 5 de noviembre. Tanto del lado republicano como del demócrata, sin olvidar a los analistas independientes, ambos contendientes han tenido despuntes y caídas, lo que dificulta la predicción de un ganador con precisión.
Por el lado de Harris, sus fortalezas van desde la facilidad del ala demócrata para conseguir el voto popular, su apertura a los derechos reproductivos, su percepción entre la comunidad afroamericana y migrante, hasta su propio historial como fiscal de distrito.
TE PUEDE INTERESAR: México, variable electoral en EU
Una encuesta de Blueprint, del 11 de septiembre, reveló que el 45% de quienes vieron el debate ahora apoyan más a Kamala Harris, y el 56% considera que ella lo ganó, incluyendo al 50% de los votantes independientes.
Por el lado de Donald Trump, uno de los factores que ha jugado a su favor tanto en sus enfrentamientos con la justicia como en la carrera electoral es su capacidad para aprovechar el momento actual. Esto se reflejó en el impacto de los huracanes Helene y Milton en Florida, Georgia y las Carolinas. En la emergencia, Trump aseguró que la agencia federal de emergencias (FEMA) desviaba fondos de ayuda en casos de desastres para albergar a inmigrantes ilegales. Aunque esta afirmación no ha sido verificada, le ha servido para ganar el apoyo de muchos damnificados.
SIGUE LEYENDO: Inmigrantes y economía de EU: las propuestas
El propio mensaje de Trump ha sido otro de sus aciertos entre el electorado. Al abordar temas como la migración, el cambio climático y la generación de empleos, ha convertido las preocupaciones estadounidenses en su principal arma discursiva.
Al respecto, Timothy J. Lynch, profesor de la Universidad de Melbourne, dejó claro que Trump tiene más posibilidades que Harris de conseguir los 270 votos electorales necesarios, a diferencia de Harris, que se apoya más en el voto popular.
Factores sorpresa
Una figura controvertida que ha surgido recientemente en el panorama político y ha favorecido a Trump es el empresario Elon Musk. No sólo se ha convertido en uno de los mayores donantes de su campaña, sino que incluso podría rozar la ilegalidad en sus intentos de asegurar el triunfo republicano.
En los últimos mítines de Trump, Musk ha ofrecido hasta un millón de dólares diarios a los simpatizantes del candidato que firmen una petición a favor de la libertad de expresión y el derecho a portar armas. Estos esfuerzos ya están bajo investigación, ya que se considera ilegal ofrecer incentivos financieros para influir en el voto.
TE PUEDE INTERESAR: Trump, “fascista y trastornado”
Richard Hasen, jurista especializado en derecho electoral, afirmó al Financial Times que tales acciones violan la prohibición fundamental de la compra de votos en las elecciones federales de Estados Unidos. Josh Shapiro, gobernador de Pensilvania, sugirió que el caso podría ser remitido a las autoridades de justicia.
Musk podría no ser un actor aislado. Hace dos semanas, varios mercados de predicción comenzaron a otorgar más probabilidades de victoria a Trump. Un pequeño grupo anónimo de traders apostó a favor del republicano, elevando sus posibilidades al 62% en la plataforma Polymarket. Las sospechas sobre Musk crecieron cuando compartió datos sobre estas probabilidades, al afirmar que “el mercado es más preciso que las encuestas, ya que hay dinero en juego”.
SIGUE LEYENDO: Generación Z y la división de género en elección entre Trump y Harris
Hasta el momento, Musk ha aportado 75 millones de dólares a la campaña de Trump y ha afirmado su apoyo al discurso antiinmigrante del candidato. En respuesta, Trump ha prometido incorporarlo en una nueva “comisión de eficiencia del gobierno”, donde Musk tendría la facultad de sugerir recortes en las agencias federales, entre otras funciones.
Estas elecciones se perfilan como las más costosas en la historia de Estados Unidos. El gasto total se proyecta en un récord de 15.9 mil millones de dólares, al superar significativamente los 14 mil millones destinados a las campañas presidenciales de 2020.
Se espera que 240 millones de estadounidenses acudan este 5 de noviembre a las urnas para decidir no sólo al Presidente de su país, sino a una de las figuras más poderosas del mundo.
