Los gobernadores y la jefa de gobierno de la Ciudad de México que este año entran en funciones no sólo tienen retos en materia de seguridad, salud o gobernabilidad, también en rendición de cuentas. A ellos les tocará aclarar millones de pesos que otras administraciones usaron de forma irregular y que hasta la fecha no se han podido justificar ni regresar al erario.
De acuerdo con el Sistema Público de Consulta de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) revisado por ejecentral, del año 2000 a la fecha se han realizado dos mil 686 auditorías a las nueve entidades que este año renuevan sus gobiernos.
En esas entidades aún falta que se aclaren o devuelvan a la Tesorería de la Federación 49 mil millones de pesos, casi el cuádruple del presupuesto que este año tiene la Secretaría de Gobernación, el cual es de 10 mil 868 millones de pesos.
Del análisis de los datos se identifica que los años de transición son un foco rojo, pues no se solventan las irregularidades detectadas.
›Uno de los estados que va más rezagado en materia de rendición de cuentas es Morelos. Desde 2004 a la fecha, todavía no aclara ni recupera nueve mil 755 millones de pesos, de los cuales tres mil 756 millones de pesos corresponden a anomalías en el manejo de los recursos públicos durante la administración de Cuauhtémoc Blanco, quien hoy es diputado federal por Morena.
El resto de los recursos sin aclarar, es decir, cinco mil 998 millones de pesos, son por irregularidades identificadas en la Cuenta Pública de 2018, es decir, durante el último año de gobierno del perredista Graco Ramírez. En octubre de ese año entró a la gubernatura Cuauhtémoc Blanco.
La ASF ha realizado 286 auditorías al gobierno de Tabasco del 2000 a la fecha y todavía no se aclaran ni recuperan 12 mil 833 millones de pesos, de los cuales 11 mil 317 millones corresponden en la revisión a la Cuenta Pública 2018, cuando gobernaba el perredista Arturo Núñez. Pese a que ya pasaron seis años sin que se ofrezca una explicación sobre el mal uso del dinero público, la ASF no ha presentado ninguna denuncia penal.
Lo mismo sucede con el gobierno de Puebla, de los 11 mil millones de pesos que todavía no se recuperan de las revisiones de los últimos 24 años,siete mil 663 millones son por el uso irregular de los recursos del año 2018, al final del gobierno del panista Antonio Gali Fayad, pues el 14 de diciembre de ese año asumió el cargo Martha Érika Alonso.
Otro ejemplo, desde el año 2000 a la fecha, la ASF ha practicado 307 auditorías al gobierno de Jalisco. No se han recuperado seis mil 802 millones de pesos determinados por la ASF como un posible daño a la Hacienda Pública Federal, seis mil 396 millones corresponden a la Cuenta Pública 2018, al término del gobierno del priísta Aristóteles Sandoval. En diciembre de ese año entró al gobierno el emecista Enrique Alfaro.
En Jalisco, la ASF emitió pliegos de observaciones en el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, el Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas, el Seguro Popular y Prospera, entre otros.
El gobierno de Chiapas aún debe aclarar dos mil 576 millones de pesos, de los cuales mil 309 millones de pesos son por irregularidades detectadas en la Cuenta Pública 2019, durante el gobierno del morenista Rutilio Escandón, quien deja la gubernatura en diciembre próximo. Si no justifica qué pasó con ese dinero o los devuelve, quien tendría que aclarar la situación sería el morenista Eduardo Ramírez, quien asume la gubernatura el 8 de diciembre.
De los mil 309 millones de pesos que no se han aclarado de la Cuenta Pública 2019, se encuentran 285.9 millones de pesos por anomalías en el manejo del programa Apoyos a Centros y Organizaciones de Educación, como el no reintegrar los recursos y rendimientos financieros no ejercidos. También las inobservancias a la normativa del programa Escuelas de Tiempo Completo que causaron un probable daño al erario por 141 millones de pesos.
En la Ciudad de México, la ASF ha llevado a cabo 275 auditorías del 2000 a la fecha y aún se deben aclarar mil 832 millones de pesos que se utilizaron de forma irregular en otras administraciones.
De nueva cuenta, en el año en que se renueva el gobierno es cuando se registra el mayor monto usado de forma irregular. De acuerdo con la numeralia de la Auditoría, no se ha aclarado el destino de mil 403 millones de pesos. Ese año, la Ciudad de México tuvo tres jefes de Gobierno: Miguel Ángel Mancera salió en marzo; su sustituto, José Ramón Amieva, dejó el cargo en diciembre, mientras que Claudia Sheinbaum tomó posesión el 5 de diciembre.
El gobierno de Guanajuato, por otro lado, debe aclarar 57.9 millones de pesos, rendición de cuentas que no se hizo en la administración del panista Diego Sinhue y que heredó a Libia García. De acuerdo con los datos históricos de la ASF, los gobiernos de esta entidad habían justificado o regresado todos los recursos que habían sido observados desde el año 2004.
En Veracruz, el morenista Cuitláhuac García le heredará la misma problemática a Rocío Nahle. En esa entidad faltan por aclarar tres mil 684 millones de pesos, de los cuales dos mil 599 son por anomalías observadas en la administración de Cuitláhuac García. De no aclararlas, el 1 de diciembre, la responsabilidad de rendir cuentas de esos recursos recaerá en Rocío Nahle.
Yucatán no es la excepción, los datos de la ASF arrojan que falta la aclaración o devolución de 253 millones de pesos, de los cuales, 45.7 millones son por anomalías en el manejo de los recursos públicos del gobierno de Mauricio Vila. El ahora senador del PAN también heredó la problemática, pues hasta la fecha no se ha aclarado qué pasó con 191 millones de pesos observados por la ASF en la Cuenta Pública 2018, último año de gobierno de Rolando Zapata.
