El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, sostuvo una reunión privada con los líderes parlamentarios de la Cámara de Diputados en la sede del Congreso de la Unión, en San Lázaro, para discutir la estrategia de seguridad del gobierno federal y la propuesta de reforma constitucional que buscaría otorgar mayores facultades de investigación de delitos a la Secretaría de Seguridad.
García Harfuch llegó al Palacio de San Lázaro poco después de las 12:30 horas, donde fue recibido por Ricardo Monreal, líder de la mayoría parlamentaria de Morena; Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva, y Gabriela Jiménez, vicecoordinadora de Morena. Más tarde se unieron Rubén Moreira, coordinador del PRI, y Reginaldo Sandoval, del PT, para participar en la discusión.
Durante el encuentro, el funcionario expuso los detalles de la estrategia federal contra la delincuencia, que llega en un momento de creciente preocupación por los altos índices de violencia en diversas regiones del país. Este contexto se enmarca especialmente en los recientes ataques ocurridos en bares de Querétaro y el Estado de México, que han generado alarma en la opinión pública y entre los legisladores.
Uno de los temas centrales abordados fue la iniciativa de reforma constitucional que otorgaría a la Secretaría de Seguridad más herramientas legales para investigar delitos y fortalecer la coordinación con otras instituciones de justicia en México. Este esfuerzo busca abordar los desafíos en materia de seguridad y justicia que enfrentan diversas entidades federativas.
La violencia registrada en Querétaro, que dejó diez muertos y varios heridos en un ataque ocurrido en un bar, fue uno de los ejemplos citados por los legisladores para contextualizar la urgencia de fortalecer las estrategias anticrimen. Rubén Moreira, coordinador del PRI, expresó en redes sociales su indignación ante estos hechos y cuestionó la falta de respuesta ante la violencia, subrayando la necesidad de que las autoridades asuman su responsabilidad para detener estos episodios.
“Masacre en Querétaro. En un país dividido reina la violencia. Asesinan a diez personas y dejan heridas a siete. Así fue el ataque. Pronto quedará en el olvido. Los propagandistas dirán que es culpa de un gobierno que terminó hace 12 años. La indolencia es un regalo para los criminales”, escribió Moreira en sus redes sociales antes del encuentro con García Harfuch.
Este tipo de reuniones en la Cámara de Diputados son clave para alinear esfuerzos entre el Ejecutivo y el Legislativo en temas de seguridad, especialmente ante el panorama de violencia que afecta a diversas regiones del país. El diálogo entre las partes podría determinar el curso de nuevas políticas y reformas que buscan responder a las exigencias sociales de un México más seguro.