Ni dos guerras mundiales pudieron terminar con uno de los símbolos de la cultura europea edificado hace casi nueve siglos, pero sí pudieron las estrechas calles y puentes alrededor de Notre Dame, que significaron problemas de acceso y logística para combatir el incendio de la famosa catedral en París, Francia.
La parte más alta de la Catedral de Notre Dame comenzó a arder en llamas poco antes de las siete de la noche, tiempo local. El fuego inició a las 18:50, según las primeras sospechas, por los trabajos que realizaban para remozar la aguja principal de esta joya del estilo gótico, que tardaron 182 años en construir, de 1163 a 1345.
Este lunes 15 de abril de 2019 marcó la historia. Casi tres horas después de comenzar el fuego y combatirlo, los bomberos y las autorizadas dieron casi todo por perdido. “La salvación del monumento no está asegurada”, declaró Laurent Nuñez, secretario de Estado del Interior.
La Catedral de Notre Dame está localizada en la pequeña isla de la Cité, rodeada por las aguas del río Sena. Los accesos cercanos para llegar a la isla son cuatro puentes, sin embargo, sólo uno, el que está al sur de la edificación, da casi directo a la fachada. Los otros tres están a al menos 230 metros de distancia.
Por si fuera poco, las calles ya en la isla son angostas, pues fueron diseñadas en la edad media y no imaginaban si quiera zona de maniobra para evitar un desastre 674 años después.
Llegaron al menos 400 bomberos a los alrededores de la Catedral. Estaban sobre las dos ajustadas vías.
Hacia el norte de la Catedral está el otro acceso más cercano a la isla, pero del puente al punto más inmediato de la edificación hay 260 metros, que pudo significar kilómetros para los bomberos y las mangueras con el agua necesaria para controlar las llamas.
El jardín que está en la parte posterior de la catedral y a uno de los costados, también dificultaron las labores.
Los barcos bomberos por el Río Sena quedaron alejados del siniestro y el riesgo para la población en la zona urbana no permitió usar helicópteros.
Además, utilizar aviones cisterna para apagar las llamas, como lo sugirió el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tampoco era una opción, pues hubiese podido destruir todo el monumento, informó por Twitter la dirección de seguridad civil de París
Cerca de la medianoche en Francia, la policía local dio una buena noticia, entre un día de horror: se logró salvar la estructura y dos de las torres de la Catedral de Notre Dame, la obra que logró sobrevivir a dos guerras mundiales.
Arde un pedazo de la historia de Europa: La Catedral de Notre Dame
LGG