El opositor ruso encarcelado Alexéi Navalni y varios de sus colaboradores más cercanos son objeto de nuevas acusaciones de “extremismo” que pueden merecer penas de cárcel largas, anunciaron los investigadores el martes.
Según un comunicado del Comité de investigación, encargado de las principales investigaciones en Rusia, Navalni y sus aliados fueron acusados de haber “creado y dirigido una organización extremista” que de 2014 a 2021 pedía “un cambio de poder por la vía violenta”.
Las organizaciones vinculadas a Navalni fueron prohibidas en junio por extremismo, cuando faltaban pocos meses para las legislativas celebradas el 19 de septiembre.
El partido del presidente Vladimir Putin se proclamó ganador en estos comicios, en medio de acusaciones de fraude y ante la ausencia flagrante de cualquier forma de oposición real, ya que las formaciones anti-Kremlin no pudieron presentarse.
Además de Navalni, estas nuevas investigaciones tienen por blanco a dos de sus colaboradores más cercanos: Ivan Jdanov y Leonid Volkov, ambos en el exilio desde hace meses.
Las autoridades rusas reprochan al opositor y militante anticorrupción que haya querido “desacreditar a los órganos del Estado y sus políticas, desestabilizar la situación en las regiones, crear el deseo de protestar entre la población y convencer a la opinión pública de la necesidad de un cambio de poder por la vía violenta”.
Navalni, Jdanov y Volkov podrían ser condenados a entre 6 y 10 años de cárcel si son declarados culpables.