Qué ingratos

26 de Noviembre de 2024

Gabriela Sotomayor

Qué ingratos

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Cuando la pandemia se instaló en México, los médicos nacionales se la rifaron para salvar y atender a cuantos pacientes fue posible. Sin material de protección, sin mayor orientación, sin apoyos, con agresiones recibidas en las calles, sin recibir aplausos, pero dotados con mucho corazón, el personal de salud siguió su vocación y acudió a darle la pelea al temible virus.

Al tiempo que la comunidad médica y científica del país, luchaba de sol a sol y sin las herramientas necesarias, en Palacio Nacional menospreciaban el impacto del Covid. Tan fue así que la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador “que se lo tome en serio”.

Después, cuando llegaron las vacunas, AMLO decidió vacunar primero a los maestros, en lugar de inmunizar a los doctores, doctoras, enfermeros, enfermeras, personal de aseo, de ambulancias que se la jugaban en la línea de fuego. Algunos médicos del sector público tuvieron más suerte y recibieron la vacuna como una dádiva. Pero médicos privados tuvieron que protestar, ir a la corte e incluso escribir a la OMS pidiendo ayuda. Así fueron discriminados mientras la 4T cambiaba vacunas por votos. Que no se nos olvide.

Ahora que pasó la tormenta, me parece inaudito, aberrante, injusto y desafortunado que dos médicos como el secretario de Salud, Jorge Alcocer, y el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, insulten desde la tribuna presidencial a sus propios colegas.

Todo por el capricho de AMLO de contratar a 500 médicos cubanos y la compra de la vacuna Abdala a la que la OMS no ha dado su aval y mucho menos para vacunar a menores de 12 años. La OMS solamente autoriza Pfizer para niños de cinco a 11 años. ¿Por qué inmunizar a los niños con una vacuna de efectividad dudosa?

Quizá las vacunas, los médicos, los acuerdos, todo lo hace AMLO para justificar el apoyo económico a Cuba y de paso importar adoctrinamiento y espías. No está claro cuánto le debe al régimen castrista, pero es evidente que le están pidiendo pagar sus cuentas.

Alcocer presentó en la mañanera una gráfica a modo en la que demostró que “casualmente” hay 510 vacantes a las que “nadie quiere ir” y que están pintaditas a mano para los altruistas médicos cubanos. Y después junto con López-Gatell despotricaron contra los médicos mexicanos.

¿Qué incentivos ha ofrecido la 4T en estos años para que los egresados mexicanos vayan a lugares remotos o inhóspitos? Por ejemplo, a los trabajadores humanitarios que van a zonas lejanas o en conflicto, les ofrecen mejores sueldos, prestaciones, seguros médicos para sus familias, seguros de vida, becas para sus hijos, entre otras. ¿Y qué les ha ofrecido AMLO a nuestros médicos? Ingratitud.

En lugar de dar alicientes a los de casa, AMLO prefiere llevar a 500 médicos, que a su vez son víctimas del régimen pues el gobierno de La Habana se queda con el 75% o hasta el 90% de lo que el estado mexicano paga por sus servicios. La ONU ha calificado de “trabajo forzoso, trata y esclavitud moderna” a estas misiones de médicos cubanos.

En una carta enviada a La Habana las relatorías especiales de la ONU sobre las formas contemporáneas de esclavitud y sobre la trata de personas, cuestionaron al gobierno de Miguel Díaz-Canel sobre estos delicados temas: “Entre 2011 y 2015 los profesionales contratados en el exterior habrían aportado un promedio anual de más de 11 millones de dólares. De esa cantidad, al menos un 80% habría sido tributado por los especialistas de la salud’’.

“Quisiéramos expresar nuestra preocupación pues el exceso de horas trabajadas ilustra la explotación laboral a la cual estarían sometidos los médicos cubanos, por las condiciones de trabajo y de vida que les estarían afectando y los pagos salariales inadecuados. Además, muchos de estos profesionales estarían sometidos a presiones del gobierno’’, remarcan.

“Las condiciones de trabajo reportadas podrían elevarse a trabajo forzoso, según la Organización Internacional de Trabajo (OIT). El trabajo forzoso constituye una forma contemporánea de esclavitud’’, acusó la ONU.

AMLO está hundiendo en el fango su relación con la comunidad médica y científica nacional, prefiere enemistarse y llevar al país a médicos sometidos a esclavitud moderna, trata o trabajo forzoso.

AMLO y sus rémoras atacan al personal de salud, a pasantes o estudiantes de medicina, a miles de mexicanos y mexicanas que trabajaron sin descanso, que lo dieron todo por sus pacientes. Esa es la moneda con la que les paga la 4T. Qué ingratos.

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