El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, denunció que existe una crisis humanitaria y de seguridad creciente en su frontera con México, citando tráfico de drogas, de personas y hasta una potencial infiltración de terroristas aunque sin hablar de “emergencia nacional”, a la par que insistió en que construir el muro es “el mejor y único remedio” para atajarla, en su mensaje desde la oficina Oval de la Casa Blanca. “Esta es una crisis del corazón, una crisis del alma”, señaló esta noche en un mensaje a la Nación en cadena nacional, en la tercera semana del cierre parcial de la administración a raíz de la disputa entre republicanos y demócratas sobre el financiamiento del muro con México.
También pidió 5 mil 700 millones de dólares para construir un muro que será de acero y no de hormigón, en un horario de máxima audiencia, a las 21:00 hora local (20:00 horas del centro de México).
Si se aprueba este presupuesto, el muro “será pagado indirectamente por el gran nuevo acuerdo comercial que hemos hecho con México”, agregó.
La expectativa sobre el anuncio presidencial terminó sin novedades. Una de las incógnitas era si Trump iba a recurrir a la ley de emergencias, que permite pasar por encima del Congreso para comenzar, apoyándose en el ejército, los trabajos de construcción del muro. Pero en su discurso no evocó esta posibilidad y solo repitió los argumentos que ha ido diciendo en los últimos días.
Citó un crisis de seguridad en la frontera con México ante el flujo de migrantes, mientras sus opositores lo acusaron de tener como “rehenes” a los estadounidenses. En su intervención, el Presidente dijo que los agentes fronterizos se enfrentan cada día a “miles de inmigrantes ilegales” que intentan entrar al país y citó que en los últimos dos años los oficiales de inmigración arrestaron a 266 mil extranjeros con antecedentes criminales. Los arrestados incluyen a personas que cometieron 100 mil asaltos, 30 mil delitos sexuales y 4 mil homicidios con violencia. El polémico tema del muro con México lo dejó para la porción final de su discurso, que leyó de pausado y al parecer sin salirse del guión, algo poco recurrente.
“Este muro es absolutamente crítico para nuestra seguridad fronteriza. Es simplemente sentido común... es le mejor y único remedio”, dijo el mandatario republicano, y “rápidamente se pagará a sí mismo”, agregó.
Trump aseguró que la propuesta de seguridad nacional propone tecnología de punta. “Pedimos más jueces y más agentes”, agregó en la transmisión en vivo en horario estelar desde el Despacho Oval, la primera en lo que va de su mandato.
El jefe del Ejecutivo estadounidense culpó a los demócratas de no querer resolver el abrir el gobierno y aseguró que de haber voluntad para ello resolvería el asunto en 45 minutos. “Cuánta sangre debemos derramar para que el Congreso haga su trabajo”, añadió.
“Mis queridos estadounidenses, hoy les hablo porque hay una crisis humanitaria y de seguridad creciente en nuestra frontera sur”, dijo aunque el número de detenciones se ha reducido drásticamente en las últimas dos décadas.
En el año 2000, un millón 600 mil personas fueron detenidas intentando cruzar la frontera sur hacia Estados Unidos, una cifra que en 2018 se redujo a menos de 400 mil, según cifras oficiales.
El actual cierre del gobierno afecta a unos 800 mil funcionarios federales que se ven obligados a quedarse en casa o a esperar el final del bloqueo para recibir su salario
Reunión en la Casa Blanca
ES DE INTERÉS |
No gobernamos con berrinches. Termine el cierre: demócratas a Trump