La tasa de muertes por sobredosis de drogas entre los adolescentes de Estados Unidos prácticamente se duplicó durante 2020, en comparación con el promedio de los 10 años anteriores a la pandemia de Covid-19. Y en la primera mitad de 2021 aumentó un 20% adicional.
Esta es la primera vez, desde que se tiene registro, que la tasa de mortalidad de adolescentes por esta causa tiene un aumento de este tamaño. Sin embargo, de acuerdo con una investigación de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) el consumo de drogas en ese periodo se mantuvo aproximadamente en los mismos niveles de antes.
De hecho, las tasas de uso de drogas ilícitas entre los adolescentes están en mínimos históricos, dijo Joseph Friedman, autor principal de la investigación en un comunicado, y el estudio, que se publica hoy en el Journal of the American Medical Association parece indicar que el problema no se debe a la presencia de Covid-19 ni a las medidas no farmacológicas.
“El consumo de drogas se está volviendo más peligroso, no más común”, agrega Friedman. “Los aumentos se deben casi en su totalidad a los fentanilos ilícitos, que se encuentran cada vez más en píldoras falsificadas. Estas píldoras falsificadas se están extendiendo por todo el país y es posible que los adolescentes no se den cuenta de lo peligrosas que son”.
Después de que en 2010, la tasa de muerte fue 2.4 por cada cien mil adolescentes de 14 a 18 años (fueron 518 muertes en total en EU) y de que en los siguientes años hasta 2019 la tasa fuera de 2.36, en 2020 hubo un fuerte aumento a 954 muertes de adolescentes en total, lo que significa una tasa de 4.57 por cada cien mil.
Friedman considera que “se debe presentar información precisa sobre el riesgo de las drogas en las escuelas. Los adolescentes deben saber que las píldoras y los polvos presentan el mayor riesgo de sobredosis, ya que es más probable que contengan fentanilos ilícitos”.
Por la naturaleza observacional del estudio no puede establecer causalidad, así como tampoco se pudo saber qué papel jugaron la ideación suicida, el aislamiento social y otros factores exclusivos de la pandemia.
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