Muere enfermero atacado por sus vecinos sólo por tener Covid-19
TIJUANA, BAJA CALIFORNIA, 17ABRIL2020.- Al ser los primeros respondientes en llamadas de emergencia por cuestiones de salud, el personal médico de la Cruz Roja se encuentra en la primera línea de batalla durante la actual pandemia del Covid-19, virus con el que se han contagiado 3 mil 160 personas y el cual ha matado a 941 personas en la ciudad fronteriza. Fue a principios de marzo cuando la institución comenzó a recibir llamadas de auxilio por personas con síntomas de coronavirus, con el paso de las semanas han llegado a atender a un promedio de 40 pacientes diarios, quienes presentaban fiebre, falta de aire, tos seca y dolores musculares. Las llamadas de emergencia se registran a todas horas del día, el personal encargado de recibirlas comunica el reporte con prontitud a los paramédicos, haciéndoles hincapié en las medidas de protección que deben tomar para evitar que contraigan el virus. Para ello, la institución asignó ambulancias y personal especializado para atender exclusivamente casos de personas sospechosas de Covid-19, una vez que llegan al domicilio, los paramédicos de Cruz Roja evalúan al paciente para saber qué tipo de atención requiere; se le toma la temperatura y se revisan los niveles de oxígeno en la sangre, en caso de ser necesario el traslado se realiza un protocolo de seguridad para llevar al paciente a uno de los hospitales Covid que fueron habilitados en Tijuana. A mediados de abril los hospitales de la ciudad fronteriza estuvieron prácticamente rebasados por la alta demanda de atención de pacientes con síntomas, lo que causó que los socorristas tuvieran que realizar recorridos por los diversos nosocomios para lograr encontrar algún hospital donde los pacientes pudieran recibir atención en las áreas de urgencias, muchos de ellos no lograron resistir más y murieron a bordo de las ambulancias esperando atención. Durante la pandemia derivada del Covid-19 han resultado infectados una gran cantidad de médicos, personal de enfermería, y socorristas pertenecientes a hospitales públicos y de la Cruz Roja, por lo que la benemérita institución tuvo que habilitar su propio hospital para atenderlos y contribuir a la salud de quienes están a cargo de brindar los cuidados necesarios a los pacientes. A la fecha han sido atendidos 106 profesionales de la salud en la Cruz Roja, de los cuales 42 corresponden a la propia institución, entre quienes hay médicos, enfermeras y enfermeros, socorristas, así como de sus diversas áreas Dentro del hospital de la Cruz Roja se manejan “áreas limpias” y “áreas sucias”, en las cuales el personal médico que está en contacto con pacientes contagiados debe seguir los protocolos sanitarios al pie de la letra para evitar contraer el virus, fueron capacitados mediante videos informativos sobre el procedimiento para ponerse el traje de protección, los guantes, las caretas y los cubre bocas, así como el proceso para quitárselos y cómo desecharlos con seguridad. El personal médico asignado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) atiende durante jornadas de trabajo dobles y sin descanso a los pacientes contagiados, aunado a los llamados de auxilio que se dan todos los días por accidentes y personas que sufren de otras enfermedades, quienes también necesitan atención y deben ser tratados con la misma urgencia. La heroica labor del personal de la institución implica un gran riesgo para su salud y la de sus familias, es por eso que muchos de ellos han tenido que alejarse de sus hijos y parejas, algunos han optado por pasar las noches en cuartos de hotel, o en casas rentadas para no exponer a sus seres queridos. La unidad de pacientes Covid está compuesta por un equipo de médicos y personal de enfermería especializado en medicina intensiva, el acceso seguro al espacio se realiza bajo rigurosas medidas sanitarias, en todo momento los médicos revisan la evolución de la enfermedad en los pacientes, parte de la labor de enfermeras y enfermeros está enfocada en proporcionarles los medicamentos, apoyar con el aseo personal de los pacientes y orientarlos en los ejercicios de respiración que se pueden realizar para reforzar sus pulmones. En el lugar se trabaja al límite, el único sonido que impera es el ocasionado por el equipo médico. FOTO: OMAR MARTÍNEZ/CUARTOSCURO.COM
Foto: Cuartoscuro
El argentino no sólo fue objeto de una salvaje golpiza, sino que tuvo que sufrir el robo de su vehículo y la quema de su casa
Falleció el enfermero argentino Daniel Porro quien fue brutalmente golpeado por sus vecinos al enterarse que tenía Covid-19.
El enfermero avecindado en el Neuquén, trabajaba en la primera línea de los trabajos para combatir la pandemia en el país Sudaméricano.
El diario La Nación informó que Miguel Porro, padre de la víctima, señaló que su hijo “nunca se pudo recuperar de aquel rechazo social”.
“En realidad, desde aquel día, no pudo volver a dormir bien. Trabajaba durante el día y, a la noche, se acostaba, pero no podía conciliar el sueño. Sufrió mucho e iba a laburar casi sin dormir”, agregó.
El enfermero no sólo fue objeto de una salvaje golpiza, sino que tuvo que sufrir el robo de su vehículo y que sus vecinos prendieran fuego a su casa.
Además, el padre de Daniel dijo que fue despedido de su trabajo por lo que tuvo que conseguir otro en un centro médico, pero no logró olvidar el hecho traumático.
El enfermero murió por un paro cardíaco el pasado 4 de julio en la casa de su madre, a la que fue a dormir. El hombre se dispuso a dormir cuando un infarto terminó con su vida.
Cabe señalar que el enfermero recibió amenazas desde mediados de junio de 2020; estuvo en confinamiento por 14 días al haber contraído el virus, hasta que salió negativo.
“Me decían que me vaya del barrio porque tenía coronavirus. No solo no tengo porque cumplí con el aislamiento, sino que me quemaron la casa y me robaron el auto”, había declarado el enfermero. DJ